Con la implementación de las nuevas tecnologías como Big Data, Machine Learning, Internet de las Cosas (IoT) e Inteligencia Artificial, entre otras; se han hecho cada vez más eficientes los procesos productivos en las organizaciones. El problema está en que muchas empresas no se atreven a aplicar estas herramientas por sonar demasiado complejas o por pensar que son para organizaciones muy grandes.
La verdad es que esto no es así; si bien se requiere contar con capacidad previa, es necesario dar el paso y adaptar las industrias en esa dirección, no porque sea la moda, sino que para no quedarse atrás en el mercado.
Innovar o quedarse atrás
Muchas compañías desechan la innovación porque están teniendo resultados con su forma tradicional de hacer las cosas. Sin embargo los modelos de negocio son puestos a prueba permanentemente; siempre hay alguien buscando una ventana de oportunidad. Es el caso de Netflix y Blockbuster, donde este último era la cadena de alquiler de videos más grande del mundo, con miles de tiendas y millones de clientes, pero no supo adaptarse a los cambios. Netflix, por otro lado, apostó por Internet y la transmisión vía streaming, innovando en el negocio gracias a la tecnología disponible, presentando una forma mucho más efectiva para entregar el mismo servicio. Más recientemente, hemos visto cómo el mercado ha sancionado duramente a Cencosud por no invertir de la misma manera en e-commerce, como lo hacen sus competidores, haciendo que su valor en la bolsa caiga de manera significativa. No se trata ahora de innovar para mejorar nuestra posición, sino de hacerlo para mantenerse.
Reinventarse permanentemente
En estos 20 años que llevamos en Chile, hemos podido ver que el sistema que funciona es aquel en que las necesidades de las personas son tomadas en cuenta por las empresas. Para eso las compañías deben contar con la flexibilidad necesaria para reinventarse permanentemente. Sin embargo, la transformación digital es mucho más compleja, implica un completo cambio cultural, donde el gran desafío es utilizar el crecimiento tecnológico en servicios que realmente agreguen valor a los clientes. Netflix basa su éxito en el hecho que los usuarios valoran la posibilidad de obtener contenido instantáneo, el que es posible de entregar gracias a las tecnologías actuales.
Como siempre, es indispensable que los gobiernos y las empresas, cada uno desde su realidad, se atrevan a dar el paso y otorguen la posibilidad a las personas de acceder a todos los beneficios posibles, asegurando un desarrollo más correcto e igualitario, ya que esta área no es el futuro, sino el ahora.
