Según el último informe anual del Foro Económico Mundial, Chile supera con creces al resto de América Latina en competitividad. Pese a estos resultados, cabe preguntarse por qué Finlandia, que en 1997 tenía una posición similar a la nuestra, en un año fue capaz de ascender al primer lugar y mantenerse allí, mientras Chile sigue ocupando lugares cercanos al 20. A juicio de Fernando Prieto, Vicepresidente Ejecutivo y Director de la Fundación País Digital, la respuesta radica en la relevancia que el país le asigna a las TI para su desarrollo. Conversamos con el ejecutivo para conocer la visión de la entidad al respecto y su aporte en el debate tecnológico.
¿Cuáles son los focos que delinean el quehacer de la fundación?
Existen dos grandes áreas. Una de ellas es Educación y Masificación, algo fundamental, ya que la sociedad del conocimiento está fuertemente ligada al nivel de calidad de la enseñanza del país y ésta, a su vez, a la información y nuevas tecnologías a las que se accede.
La otra área es Productividad e Innovación, donde estamos muy preocupados de la competiti-vidad de las Pymes y del Gobierno, a través del uso de las Tecnologías de Información, como práctica empresarial y del mundo público. Las pequeñas y medianas empresas son un motor esencial de la actividad del país, por lo tanto hay mucha capacidad emprendedora que tiene que incorporar las TI para ser más competitivos mundialmente como país.
¿Qué proyectos concretos destacaría como parte de la gestión de esta entidad?
En educación y masificación participamos, junto a otros actores, en el proyecto de la iluminación Wi-Fi del Barrio Universitario de Santiago, que es el hot spot abierto más grande de América y que beneficia a cerca de 70 mil alumnos.
Otro proyecto destacado es el concurso RegataWeb, una instancia de aprendizaje a través de las TI que integró a cerca de 5.000 alumnos. Sumado a esto, también estamos liderando la discusión sobre la relevancia de masificar los computadores personales a nivel de país, pues Chile necesita mejorar significativa-mente los índices en este sentido y sus respectivas cifras de conectividad para avanzar tecnológicamente.
Como parte de nuestra filosofía de generar debate y poner los temas en discusión, además, participamos activamente de ChileCompra y la carretera 5D, entre muchas otras iniciativas.
¿La neutralidad tecnológica debería ser un tema de debate en TI?
Como fundación estamos preocupados de hacer factible para Chile una política de neutralidad tecnológica, donde se considere como una real opción tecnológica el software libre. Esto es muy importante para bajar los costos en inversión en el área y es otro de los temas en los que estamos liderando el debate, a fin de potenciarlo.
¿La legislación chilena facilita el desarrollo y la inversión en el área?
Muchas prácticas cuando son llevadas al ámbito digital requieren cambios a la legislación vigente, la que debe ser adecuada para permitir que se lleven a cabo proyectos de inversión TI sustentables en el largo plazo, pues de otra manera se desin-centiva este tipo de propuestas, que son claramente una de las formas en las que como país podemos crecer en este sentido.
Desde nuestra labor como Fundación País Digital nos preocupamos también de destrabar los puntos críticos en los ámbitos legal, administrativo y económico, que actualmente evitan que las TI sean un habilitador del desarrollo del país.
A su juicio, ¿la falta de equidad en el país es más bien digital o económica?
Cuando hablamos de un mayor nivel de bienestar, información, cultura y enseñanza, esto tiene que darse por igual, si no estamos generando dos mundos demasiados diferentes en cuanto a contexto, conocimiento y capacidad de comprensión. Eso es lo que llamamos eufe-místicamente brecha digital, que más bien es una diferencia cultural y económica que debemos eliminar, pues si no hacemos algo al respecto redundará luego en mayores diferencias económicas. Por ejemplo, hay 300 comunas del país donde la banda ancha no está creciendo y necesitamos que exista la infraestructura de telecomunicaciones para que todos tengan acceso equitativo al conocimiento.
¿Qué necesita Chile para caminar por la vía de un país digital?
Culturalmente, Chile tiene una mucho mejor capacidad de conceptualización que de ejecución. Por ejemplo, si nos comparamos con países como Finlandia, que son más competitivos, queda claro que nos quedamos atrás en las TI. Subimos al lugar 22 del ranking de competitividad mundial, pero seguimos rezagados en montos de inversión en este tipo de tecnología. Como explicación siempre se argumenta que al ser un país pequeño no contamos con el presupuesto necesario, pero puedo aseverar que los recursos aparecen cuando las prioridades son las adecuadas y hoy no lo son. Además, existe una suerte de ‘farándula digital’ con muchas actividades y foros respecto al tema, pero si buscamos presupuestos y proyectos significativos, no los hay, y ese es el desafío pendiente.
Noviembre de 2004
