Convertirse en una empresa “data driven” implica poner en marcha no solo iniciativas de BI o analítica avanzada, sino que también un sinnúmero de esfuerzos que rediseñen el sistema de gestión de datos en toda la organización, basando su estrategia de negocio, además de un cambio en la mentalidad, prácticas y procesos asociados a todo el ciclo de vida del dato.
En este contexto, cada vez más organizaciones se embarcan en programas de Gobierno de Datos que habilitan la gestión de los datos y velan por su calidad, integridad, seguridad y usabilidad, siendo su principal objetivo promover la confiabilidad de la data para una toma de decisiones y gestión del negocio basada en evidencia.
Los pilares de una organización data driven
Instalar y gestionar un Gobierno de Datos permite sentar las bases y asegurar la existencia y escalamiento de una organización data driven. Un Gobierno de datos maduro posibilitará que las empresas pasen de lograr lanzar algunas iniciativas interesantes de analítica, a la generación continua y a gran escala, en donde la innovación y generación de valor basada en datos escala de forma sostenible en el tiempo.
Establecer una gobernanza de datos no es un proyecto con inicio y término, sino que un proceso de transformación de largo aliento y de carácter técnicoadaptativo en donde no existe una solución rápida. Abordar los típicos problemas de datos aislados y en silos, no confiables y de difícil acceso, son grandes retos por superar, más allá de una adquisición tecnológica o contratación de un equipo de ingenieros y científicos de datos. Con esto, no quiero decir que los aspectos técnicos no sean relevantes, sino que son insuficientes por sí solos.
Para abordar realmente los típicos problemas e incluso ir más allá, se requiere un cambio en la mentalidad y prácticas de toda la organización, no solo un proyecto que le concierna a un área en específico (comúnmente asociado a TI), dado de que los datos son generados, almacenados y utilizados para la toma de decisiones en distintas áreas y niveles de una organización.
Adicionalmente, no hay que olvidar de que “la información es poder”, por lo que impulsar un Gobierno de Datos es un proceso altamente emocional y político que implicará una fase de acomodamiento y negociación con el objetivo de convertir la data en un activo estratégico de la compañía y no solo de la cartera de un área particular.
Algunos consejos
Como mencioné, un programa de Gobierno de Datos se basa en una lógica técnica-adaptativa, y para ello quiero compartir algunas de las recomendaciones, desde la experiencia adquirida por EY:
• Abordar este desafío desde un “Future back approach” al conectar el Gobierno de Datos con la estrategia y visión futura de la compañía. Esto permitirá definir el para qué del Gobierno de Datos, para así dar sentido al sueño de lo que se puede lograr al impulsar este tipo de programas.
• Enfoque Top-Down: Co-crear la estrategia de datos y el modelo de gobierno con la capa ejecutiva de toda la organización, impulsando una conceptualización de la data como activo estratégico directamente conectado con los resultados del negocio.
• ¡Educar, educar y educar! Hay que tener en cuenta que el concepto de Gobierno de Datos no es un constructo fácil además de ser novedoso para la gran mayoría de las personas. No debemos dar por sentado que las personas lo entienden, es necesario e invertir en educar.
• ¿Data Owner, Data Custodian, Data Steward, Data qué? Este tipo de programas implica cambios en roles y también adquisición de nuevo perfiles, los cuales deben tomarse con la seriedad correspondiente, formalizando y socializando sus responsabilidades y metas en toda la organización.
• Invertir en Data Literacy o en español “alfabetización de datos” que es la capacidad de los colaboradores de una empresa para leer, comprender, analizar, manejar y actuar en base a datos en el grado adecuado para la toma de decisiones.
• Identificar quick-wins que permitan demostrar el valor de un Gobierno de Datos, mientras se invierte en el rediseño de todo el sistema de gestión de datos, cuyos beneficios se perciben recién en el mediano y largo plazo.
En síntesis, tomar decisiones sobre la estrategia y puesta en marcha de un Gobierno de Datos será lo único que permitirá saltar de un estado inmaduro en donde hay algunas iniciativas interesantes de analítica, a la generación de una fábrica de iniciativas en donde la innovación basada en datos es sostenible en el tiempo.
Para el éxito de esta transformación, se requiere de un abordaje técnicoadaptativo que parta desde el equipo ejecutivo e integre la estrategia y cartera de iniciativas, su programa de gobernanza y el fomento de una cultura data driven en toda la organización.