En muchas oportunidades uno de los mayores problemas en la entrega de servicios de salud en Latinoamérica es que no existe un sistema interconectado de historiales médicos, o que el mismo es ineficiente. Para poder optimizar la gestión de la salud, además de construir más y mejores establecimientos, es vital aumentar la disponibilidad de la información de cada paciente, de modo que su hoja de vida pueda ser compartida por todas las instituciones y especialistas. En otras palabras, los médicos deberían poder acceder al historial clínico de cada uno, sin importar el lugar en el que se encuentren.
Esto potenciaría el servicio de los sistemas público y privado, y elevaría la calidad de atención a sus usuarios, mientras que los profesionales podrían trabajar de manera más rápida y eficiente. Pero para que este beneficio sea posible, es necesario contar con tecnología que permita centralizar los historiales clínicos de los enfermos, enviando los datos y los recursos cada vez que un médico los necesite. La respuesta es la virtualización, que otorga la posibilidad de virtualizar los centros de datos y entregar aplicaciones y computadores de escritorio para facilitar la administración de la información médica.
La seguridad es fundamental
Ahora bien, los datos de las historias clínicas es información de gran importancia y que requiere confidencialidad, por lo que garantizar su seguridad es fundamental. En este sentido, la virtualización posibilita implementar soluciones efectivas de protección de datos, encriptando la información de notebooks o dispositivos móviles, bloqueando los puertos de computadores para los archivos marcados como confidenciales o imposibilitando su impresión o copia, entre otros. Asimismo, los distintos perfiles de las personas que ingresan a los sistemas de información son administrados centralizadamente, garantizando que nadie que no esté autorizado tenga acceso.
Contar de forma segura con todos los datos necesarios para hacer un diagnóstico es clave. Más aún teniendo en cuenta que el 80% del trabajo clínico se realiza al lado del paciente. Así, es necesario disponer de tecnología capaz de entregar información oportuna a los médicos sobre el estado de cada uno de éstos mientras hacen sus rondas. De esta manera ellos pueden definir un tratamiento más eficiente, con un importante ahorro de tiempo y garantizando confidencialidad a los usuarios.
Mejor gestión clínica
En Chile, por ejemplo, ya existen clínicas privadas que están utilizando estas tecnologías. En el sector de hospitalización, enfermeras y médicos visitan a los enfermos llevando carros que tienen incorporados un notebook. Eso les permite, ingresar en el computador la información necesaria, que viaja hacia un centro de datos para que esté disponible para ser consultada por otros especialistas.
La virtualización busca lograr una mejor gestión clínica aumentando la productividad de los profesionales de la salud, entregándoles un “punto de atención” (point of care) con alta disponibilidad, desde donde acceder a los datos de cada enfermo, desde cualquier dispositivo (notebooks, smartphones e, incluso en un futuro, iPad). El objetivo es lograr una atención de excelencia y promover el cuidado integral de la salud, con información segura y disponible de manera integral.