Intel presentó la novena generación de procesadores Intel Core, conocida con el nombre clave Cannon Lake.
Son un total de cinco modelos, comenzando por el Core i5-9600K de seis núcleos y un precio de US$ 262 en Estados Unidos. El tope de gama será el Core i9-9980XE, que cuesta US$ 1.979 y ofrece dieciocho núcleos y treinta y seis hilos.
El modelo más interesante, en cualquier caso, es el nuevo Core i9-9900K con ocho núcleos y dieciséis hilos, turbo boost hasta 5GHz en dos núcleos y un precio de US$ 488. La compañía asegura que con este procesador se obtienen “frame-rates más altos en tus juegos favoritos, en condiciones extremas y multitarea”.
Los modelos de consumo (i5-9600K, i7-9700K e i9-9900K) poseen dos canales de memoria DDR4, 40 lanes PCI Express y vienen desbloqueados de fábrica para poder hacer overclocking, aunque conservan el proceso de producción a 14nm que Intel lleva usando desde la gama Skylake. Los de la serie X, enfocada al usuario profesional, aumentan el número de canales de memoria DDR4 a cuatro y las lanes PCI Express a 68.
