Diana Urdiales, de la Dirección Comercial Latinoamérica de Cyberoam; Marcelo Díaz, Gerente General de Virus Expert.
“Las redes sociales pueden ser muy beneficiosas, pero también una fuente de exposición corporativa que puede tornarse peligrosa. Esto, porque hay usuarios ignorantes, vulnerables a ataques dirigidos, y usuarios con antipatía que buscan hacer daño”, indicó Marcelo Díaz, Gerente General de Virus Expert, representante en Chile de Cyberoam.
Durante el reciente encuentro de seguridad informática, realizado en CasaPiedra, Infosecuity 2011, el ejecutivo explicó los peligros a los que las empresas actuales están expuestas y cómo enfrentarlos. “La fuga de la información es la mayor amenaza del siglo XXI. Sólo en el 2010, hubo más de 300 millones de programas maliciosos únicos, aumentaron en un 93% los ataques basados en web y se realizaron 14 nuevos ataques zero day por día”, precisó.
A ese escenario, explicó Díaz, se suma el hecho de que existen unas 260 mil identidades expuestas y los incidentes de hackeo terminan en el robo de identidad a las organizaciones. “Por ello, los desafíos son muy grandes. Las redes son cada vez más complejas y heterogéneas. Además, día a día, aumentan los usuarios móviles y el uso de tecnologías móviles e inalámbricas”, señaló.
Efectivamente, según datos aportados por Safeware Insurance, en Estados Unidos, 10 mil laptops son robados o extraviados por semana en 36 aeropuertos (1 cada 53 segundos); más de 9 mil memorias USB son encontradas cada año en los bolsillos de prendas enviadas a lavanderíaa en el Reino Unido; y cada seis meses son olvidados más de 12 mil 500 dispositivos electrónicos (iPod, MP3) en el asiento trasero de los taxis (69 diarios). Todo ello, con información valiosa, personal y corporativa.
Asimismo, el uso de las redes sociales, que puede ser muy provechoso, tanto en lo privado como en lo profesional, puede transformarse en un arma de doble filo, al momento de publicar información. “Una persona puede tener una conversación, a simple vista, trivial respecto de su trabajo con un amigo, en Facebook o Twiter. No obstante, sin saberlo puede estar entregando datos importantes que son claves para la imagen de la organización en la que trabaja”, advirtió Díaz.
De acuerdo al ejecutivo, todos estamos expuestos, tanto grandes corporaciones, como pequeñas y medianas empresas, además de usuarios comunes. “Por eso, lo que debemos hacer es identificar los riesgos a los que nos enfrentamos, conocer las medidas preventivas y estar atentos a las nuevas amenazas”, concluyó.