Para detectar, prevenir y responder a incidentes de ciberseguridad, las empresas pueden recurrir a los Centros de Operaciones de Seguridad (SOC), el polo neurálgico de su infraestructura de ciberseguridad, donde se combinan personas, procesos y tecnologías para salvaguardar los activos digitales. Por ello, un SOC eficiente actúa como una línea de defensa crucial, defendiendo a la organización contra ciberamenazas cada vez más sofisticadas y protegiendo la información confidencial, la propiedad intelectual y los datos de los clientes.
¿Qué es un SOC?
SOC (del inglés “Security Operations Center”) se refiere al equipo responsable de proteger los activos de una organización mediante una plataforma tecnológica que detecta, analiza y responde a incidentes de ciberseguridad, mitigando los riesgos asociados y garantizando la integridad, confidencialidad y disponibilidad de la información.
Para ello, un SOC cuenta con un grupo de profesionales capacitados en ciberseguridad que emplean tecnología, procesos y políticas para resguardar los activos de la organización, los que pueden incluir redes, servidores, aplicaciones, bases de datos y datos confidenciales. Entre éstos, se encuentran analistas, ingenieros de seguridad y gerentes que supervisan las operaciones de seguridad.
Su importancia radica en la necesidad de proteger los sistemas y datos de las empresas. De hecho, y según la Encuesta Nacional de Ciberseguridad (ENCI) realizada por el Centro de Estudios Tecnológicos de la Información de la Universidad Católica (CETIUC), los incidentes de ciberseguridad incrementaron en promedio un 31,6% durante el año 2022. Otra cifra preocupante la entrega el “Informe Verizon sobre brechas de datos”: el 85% de las brechas de datos en 2021 registró un tiempo de detección de semanas o más.
En ese sentido, los gerentes y directores ya están prestando atención a estos incidentes: un reporte reciente del World Economic Forum (WEF) reveló que el 67% de los ejecutivos identificó la continuidad del negocio y el 65%, el daño a la reputación como los principales riesgos cibernéticos para sus organizaciones. Además, el Benchmark de Gestión de la Ciberseguridad 2021 (parte de la ENCI) estableció que el 62% de las organizaciones ya indicaba que la prevención era prioridad número uno de inversión en materia de seguridad de la información.
¿Qué hace un SOC?
Como el encargado de desplegar el plan de respuesta ante incidentes, un SOC realiza las siguientes funciones:
- Monitoreo de seguridad: Supervisión constante de los sistemas y redes en busca de actividades sospechosas o maliciosas. Esto se logra a través de la implementación de sistemas de detección de intrusiones, análisis de registros y otras tecnologías de seguridad.
- Detección de incidentes: Identificación temprana de incidentes de seguridad, como intrusiones, malware o ciberataques. Los integrantes del SOC analizan los eventos registrados y toman medidas para responder y mitigar los incidentes.
- Respuesta a incidentes: Una vez que se detecta un incidente de seguridad, el SOC toma medidas para contenerlo, investigarlo y remediarlo. Esto puede incluir bloquear direcciones IP maliciosas, aislar sistemas comprometidos, eliminar malware y restaurar la funcionalidad normal.
- Análisis forense: En caso de incidentes graves, el SOC puede llevar a cabo investigaciones forenses para determinar el origen y el alcance de un ataque. Esto implica recopilar evidencia digital, analizar registros y registros de eventos, y proporcionar informes detallados para su posterior revisión y acción legal, si es necesario.
- Mejora continua: El SOC también se encarga de evaluar y mejorar constantemente los controles de seguridad existentes, así como de implementar nuevas tecnologías y procesos para hacer frente a las amenazas emergentes.
Otras funciones
El SOC también puede realizar otras funciones, como la gestión de vulnerabilidades, la implementación de controles de seguridad, la educación y concientización del personal, y la colaboración con proveedores externos de servicios de seguridad.
También existen varios desafíos en la operación de un SOC. Por ejemplo, en una entrevista a través de video con Information Security Media Group, Nat Smith, Analista Director Senior de Gartner, aboga por un “cambio de infraestructura” en el SOC. “En lugar de mirar una alerta entrante y validar si esa alerta es precisa o no, tenemos que mirar a la escala completa -todo lo demás que esperaríamos- y ver si vemos algunas de estas pistas. Ese es el punto de partida”, explica. “Si vemos algunas de estas otras pistas, comenzaremos a validar que esta es una actividad real, una secuencia real que está empezando a suceder”, dice.
Al respecto, Valentín Soulages, Socio de Cyber Risk en Deloitte, sostiene que “la mayoría de las empresas tienen demasiadas herramientas y, a menudo, no son utilizadas a su máxima capacidad o no se encuentran completamente integradas entre sí”.
“Aun así, la tecnología necesita ingerir grandes tipos de datos, ya que los SIEM tradicionales luchan por manejarlos bien. Dicha telemetría debe estar correlacionada y alertada en más que simples correlaciones de reglas básicas, se necesita más inteligencia de amenazas para enriquecer la información y poder tomar decisiones más certeras. Herramientas como SOAR que unifican y organizan otras herramientas para formar un colectivo inteligente surge como una necesidad central en el SOC, junto con SIEM y otras herramientas de análisis de telemetría”, indica.
¿Qué es el SOC y el NOC?
El SOC y el NOC (Network Operations Center) son dos entidades que desempeñan funciones diferentes, pero complementarias en el ámbito de las operaciones de TI y seguridad de una organización.
Mientras que el SOC se enfoca principalmente en la seguridad de la información y la protección contra ciberamenazas, el NOC se centra en la gestión y el mantenimiento de la infraestructura de red y los sistemas de TI de una organización. Su principal responsabilidad es garantizar la disponibilidad y el rendimiento de la red, así como de los servicios y aplicaciones asociadas. El NOC supervisa y administra la red, resuelve problemas de conectividad, realiza configuraciones de equipos de red, aplica parches y actualizaciones, y realiza tareas de gestión de incidentes relacionados con la red. El NOC es esencial para garantizar que los sistemas estén operativos y funcionando correctamente.
Aunque el SOC y el NOC tienen funciones distintas, es importante destacar que trabajan en conjunto y se apoyan mutuamente. El SOC puede identificar incidentes de seguridad que afecten a la red y comunicarlos al NOC para su resolución. A su vez, el NOC puede proporcionar información y datos relevantes al SOC para mejorar la detección de amenazas y el análisis de incidentes de seguridad.
SOC como Servicio
SOC como Servicio (“SOCaaS”, por sus siglas en inglés) es un modelo en el que una empresa subcontrata las funciones y capacidades de un SOC a un proveedor de servicios especializado en ciberseguridad. En lugar de establecer y mantener un SOC interno, el cliente se beneficia de los servicios de un SOC externo.
Al optar por SOCaaS, la organización cliente puede aprovechar la experiencia y los recursos del proveedor de servicios de seguridad, que generalmente cuenta con personal altamente capacitado y especializado en la detección, respuesta y prevención de amenazas cibernéticas.
Servicios de un SOCaaS
Los servicios proporcionados por un SOCaaS pueden incluir:
- Monitoreo continuo
El proveedor de servicios monitorea constantemente la infraestructura de TI de la organización, incluyendo redes, sistemas, aplicaciones y dispositivos, en busca de actividades maliciosas o sospechosas.
- Detección y respuesta a incidentes
El SOCaaS analiza los datos recopilados y utiliza técnicas de detección de amenazas para identificar y responder a incidentes de seguridad. Esto puede implicar la notificación inmediata de incidentes, la contención de amenazas y la coordinación con la organización para tomar medidas correctivas.
- Investigación forense
En caso de incidentes graves, el SOCaaS puede llevar a cabo investigaciones forenses para comprender la naturaleza del ataque, identificar a los responsables y proporcionar recomendaciones para evitar futuros incidentes similares.
- Informes y análisis
El proveedor de servicios genera informes periódicos sobre las actividades de seguridad, las amenazas detectadas, las tendencias y las métricas de rendimiento. Estos informes ayudan a la organización a evaluar su postura de seguridad y tomar decisiones estratégicas.
Beneficios de SOCaaS para las organizaciones
Asimismo, al elegir SOCaaS, las organizaciones pueden beneficiarse de varias formas:
- Acceso a expertos en seguridad
El proveedor de servicios cuenta con profesionales altamente capacitados y con experiencia en ciberseguridad, lo que brinda a la organización acceso a conocimientos especializados sin la necesidad de contratar y capacitar internamente a un equipo de seguridad.
- Ahorro de costos
En lugar de invertir en infraestructura, herramientas y personal para establecer un SOC interno, la organización paga una tarifa periódica al proveedor de servicios, lo que puede resultar más económico a largo plazo.
- Actualización constante
El proveedor de servicios se mantiene actualizado con las últimas tendencias y técnicas de seguridad, lo que permite a la organización estar al día en la lucha contra las amenazas cibernéticas.
Cabe destacar que al optar por un modelo SOCaaS, la organización debe establecer una relación de confianza con el proveedor de servicios y asegurarse de que se cumplan los acuerdos de nivel de servicio (SLA, por sus siglas en inglés) para garantizar una protección efectiva y oportuna contra las ciberamenazas.
Desafíos en la implementación de un SOC
Respecto a por qué las organizaciones están implementando SOC en su interior, Siddharth Deshpande, analista de investigación principal en Gartner, responde que “éstas están construyendo capacidades de operaciones de seguridad interna (aunque en un sentido limitado) porque desean más control sobre su proceso de monitoreo y respuesta de seguridad. También quieren tener conversaciones más informadas con los reguladores”.
“El impacto estratégico en el negocio de un proyecto de construcción de SOC lo convierte en una iniciativa crítica para las organizaciones. Las organizaciones que deciden seguir adelante con un SOC interno asignan fondos iniciales y continuos de manera estructurada, y esperan que el proyecto se mueva con un sentido de urgencia una vez aprobado”, agregó.
En ese sentido, la implementación de un SOC (Security Operations Center) puede presentar una serie de desafíos. Algunos de los desafíos comunes en este proceso son:
- Recursos financieros
Establecer y mantener un SOC puede requerir una inversión significativa en términos de infraestructura, herramientas de seguridad, personal capacitado y capacitación continua. Obtener los recursos financieros necesarios puede ser un desafío, especialmente para organizaciones con presupuestos limitados.
- Escasez de talento
La demanda de profesionales de ciberseguridad altamente capacitados supera la oferta, lo que puede dificultar la contratación de personal especializado para el SOC. La escasez de recursos humanos en este campo puede llevar a una fiera competencia por los expertos disponibles y a dificultades para retener a los miembros del equipo.
- Conocimiento y experiencia limitados
Implementar y operar un SOC requiere conocimientos técnicos y experiencia en áreas como la detección de amenazas, el análisis forense, la respuesta a incidentes y la gestión de seguridad. Las organizaciones pueden enfrentar desafíos para adquirir y desarrollar internamente las habilidades necesarias para un SOC efectivo.
- Integración de tecnologías y herramientas
Un SOC se basa en una variedad de tecnologías y herramientas de seguridad, como sistemas de detección de intrusiones, gestión de registros, análisis de seguridad y más. Integrar estas tecnologías de manera efectiva y asegurar su interoperabilidad puede ser un desafío técnico complejo.
- Volumen de alertas
Los sistemas de seguridad generan una gran cantidad de alertas y eventos, y filtrar y priorizar las alertas relevantes puede resultar abrumador para los analistas de seguridad. El desafío radica en establecer procesos y herramientas eficientes para gestionar el volumen de alertas y garantizar que los incidentes críticos reciban una atención adecuada.
- Evolución constante de las amenazas
Las ciberamenazas están en constante evolución, con nuevos ataques, técnicas y vectores emergiendo regularmente. Mantenerse actualizado con las últimas tendencias y amenazas, y adaptar constantemente las capacidades del SOC para hacerles frente, puede ser un desafío en sí mismo.
- Coordinación y colaboración interdepartamental
Un SOC efectivo requiere una estrecha colaboración y coordinación con otros departamentos de una organización, como TI, desarrollo de aplicaciones y cumplimiento normativo. Superar las barreras de comunicación y establecer una colaboración efectiva puede ser un desafío en la implementación del SOC.
En definitiva, la implementación de un SOC no sólo requiere una planificación y gestión adecuadas, sino también contar con recursos financieros adecuados, adquisición de talento, capacitación continua, enfoque en la mejora de las habilidades y una cultura organizativa centrada en la ciberseguridad.
¿Cómo conseguir un SOC eficiente?
Para lograr la mayor eficiencia posible de su SOC, los especialistas recomiendan seguir estas recomendaciones:
- Establecer una estrategia clara
Define los objetivos y metas del SOC en función de las necesidades de tu organización. Esto incluye determinar los activos críticos, los riesgos específicos y los requisitos de cumplimiento.
- Recopilar y analizar datos relevantes
Configura sistemas y herramientas para recopilar registros, alertas y datos relevantes de seguridad de toda la infraestructura tecnológica de la organización. Esto puede incluir registros de eventos, registros de firewall, registros de aplicaciones y otros datos de seguridad.
- Implementar una arquitectura de detección y respuesta
Desarrolla una arquitectura sólida que incluya sistemas de detección de intrusos, monitoreo de seguridad en tiempo real, análisis de registros y capacidades de respuesta a incidentes. Asegúrate de contar con personal capacitado en la configuración y operación de estas herramientas.
- Automatizar y orquestar procesos
Utiliza herramientas y scripts de automatización para agilizar tareas repetitivas y rutinarias. Esto permite liberar al personal del SOC para que se concentre en actividades de mayor valor, como la investigación de incidentes y la respuesta a amenazas.
- Establecer una colaboración efectiva
Fomenta la comunicación y colaboración estrecha entre los miembros del SOC y otros departamentos de la organización, como el equipo de TI, el equipo de desarrollo de aplicaciones y la alta dirección. Esto ayuda a garantizar una respuesta coordinada y eficiente a los incidentes de seguridad.
- Capacitar y retener al personal adecuado
Invierte en la capacitación continua del personal del SOC para mantenerse al tanto de las últimas tendencias y técnicas de seguridad. Además, asegúrate de contar con políticas de retención de personal efectivas, ya que la experiencia y el conocimiento acumulados son fundamentales para un SOC eficiente.
- Realizar pruebas y ejercicios periódicos
Realiza pruebas de simulación de incidentes y ejercicios de respuesta a amenazas de forma regular. Esto permite evaluar la efectividad de los procesos, identificar áreas de mejora y brindar experiencia práctica al personal del SOC.
- Mantenerse actualizado sobre las amenazas
Mantente al tanto de las últimas amenazas y vulnerabilidades de seguridad mediante la participación en comunidades de seguridad, la suscripción a boletines informativos y el seguimiento de fuentes confiables de información de seguridad. Esto te ayuda a adaptar y mejorar constantemente las capacidades de tu SOC.
Recuerda que la eficiencia de un SOC no se logra de la noche a la mañana. Es un proceso continuo que requiere inversión, actualización constante y adaptación a medida que evolucionan las amenazas y tecnologías de seguridad, pero que otorga a las organizaciones una clara ventaja competitiva a la hora de defenderse de amenazas e incidentes de ciberseguridad que pueden poner en riesgo su operación y reputación.