La transformación tecnológica impulsada por el avance de la Inteligencia Artificial (IA) y el Internet de las Cosas (IoT) sigue revolucionando nuestra vida diaria. Una de las áreas que ha experimentado mayores modificaciones es el comercio, especialmente las tiendas de venta minorista (retail) que intentan ajustarse y competir en un entorno que fusiona lo digital con lo físico.
Esto provoca varios cambios en la forma en que las personas consumen, lo que ha afectado los métodos de compra convencionales. En la actualidad, los comercios intentan cumplir con las nuevas exigencias de los consumidores mediante el uso de tecnologías avanzadas. No obstante, especialistas en seguridad cibernética de Palo Alto Networks alertan sobre los riesgos que esto conlleva en términos de seguridad.
En una era donde el comercio está en auge, los negocios deben ajustarse a las transformaciones para tener competitividad en un entorno donde las compras por internet han cambiado drásticamente la manera de adquirir productos. Las tiendas físicas están integrando cada vez más tecnologías avanzadas para proporcionar algunas de las ventajas de las compras en línea, tales como el autoservicio de pago, el pago sin contacto y los establecimientos sin cajas registradoras. No obstante, a medida que estos comercios se vuelven más conectados, también se encuentran con retos de seguridad cibernética sin precedentes.
Con el aumento en la diversidad y el número de dispositivos inteligentes empleados en los establecimientos, es crucial llevar un control exacto de cada uno. Esta transparencia es vital para identificar dispositivos no permitidos y supervisar comportamientos inusuales, lo que asegura que los negocios puedan resguardar sus redes frente a posibles riesgos.
Para lograrlo, es esencial emplear inteligencia artificial y técnicas avanzadas de aprendizaje automático para identificar y anticipar de manera sistemática posibles amenazas antes de que tengan la oportunidad de aprovechar las debilidades en los dispositivos. Esta estrategia preventiva contribuye a minimizar la probabilidad de violaciones de datos y asegura que las tiendas se mantengan protegidas.
“Si bien el phishing y el malware son ampliamente reconocidos, los ciberdelincuentes también recurren a tácticas y dispositivos menos evidentes. Este incremento en los ataques cibernéticos, sumado al auge de los dispositivos inteligentes, subraya la importancia de que tanto empresas como consumidores prioricen la ciberseguridad”, indica Mauricio Ramírez, Country Manager para Chile de Palo Alto Networks.
Es fundamental utilizar una plataforma central que permita implementar normas de seguridad consistentes en todos los dispositivos, sin importar el fabricante o el sistema operativo. Igualmente, es esencial que la encriptación y la protección de la información sean prioritarias para las empresas, dado que los criminales pueden capturarlas y utilizarlas de manera sencilla.
El poder de la digitalización y la automatización en el ámbito del comercio minorista es inmenso, abriendo caminos para el crecimiento y la innovación. Sin embargo, esta oportunidad trae consigo riesgos considerables si las tiendas no cuentan con las protecciones adecuadas. Con el avance de la tecnología, también es necesario que las medidas de seguridad se actualicen, lo que disminuye los peligros que pueden interrumpir el funcionamiento de cualquier negocio, sin importar su tamaño. Además, es esencial asegurar la protección de la información de los usuarios y clientes, por lo que en períodos de alta actividad comercial, como durante las festividades de diciembre, es recomendable prepararse y resguardarse de manera efectiva.
La innovación tecnológica no solo acelera el proceso de compra, sino que también disminuye los gastos operativos, promueve la fidelidad del consumidor y eleva el nivel de satisfacción. Por otra parte, gracias a la automatización, se optimiza el manejo del inventario, lo que posibilita una reposición más ágil de los artículos y un servicio al cliente más efectivo, mientras que los sistemas de pago automático mejoran la eficiencia al hacer más rápidas las transacciones.
Los sistemas de seguridad basados en IoT mejoran la vigilancia para prevenir robos, mientras que se disminuye el consumo energético mediante una iluminación y equipos más eficientes. La tecnología diseñada para evitar pérdidas también contribuye a minimizar el derroche y la producción excesiva, fomentando así la sostenibilidad.
Un reporte de Starfleet Research sobre mejores prácticas de seguridad en el retail revela que el 68% ya ha puesto en marcha esta tecnología para mejorar la comunicación inteligente con los clientes, administración de inventarios en tiempo real y creación de sistemas operativos digitales.
Por esta razón, la eficiencia laboral da lugar a un modelo más sostenible, en línea con las corrientes del comercio global. Según el estudio, un 58% de los comercios están adoptando soluciones de administración de energía basadas en Internet de las Cosas, como sistemas de iluminación conectados y aplicaciones de supervisión del agua, lo que ayuda a las empresas a cumplir con sus obligaciones ambientales.