El gigante de telecomunicaciones estadounidense Verizon Communications anunció la compra por 130.000 millones de dólares de la participación del 45% que poseía la británica Vodafone en Verizon Wireless, el mayor operador móvil de EE.UU.
La operación, una de las más importantes hasta la fecha en el mercado de telefonía, supone la salida de la compañía británica del mercado estadounidense, aunque le permite disponer de una gran inyección de liquidez para nuevas inversiones en Europa.
“Las juntas directivas de Verizon y Vodafone han aprobado unánimemente la transacción que está sujeta al cierre de las condiciones, incluidas las aprobaciones reguladoras y de las juntas de accionistas de ambas compañías”, indicaron en un comunicado conjunto ambas empresas.
Verizon detalló que Vodafone recibirá por la venta de su participación 58.900 millones de dólares, el equivalente a 60.200 millones de dólares en acciones de Verizon y 11.000 millones de dólares en otro tipo de transacciones, algo que quedaría cerrado en el primer trimestre de 2014.
Con la compra Verizon pasará a controlar el cien por ciento de Verizon Wireless, una de sus unidades de negocio más rentable y con más proyección en Estados Unidos, al tiempo que aseguró que “permitirá proveer a los consumidores con un servicio continuado e integrado”.
La compra, una de las más onerosas de la historia en el sector y por encima de lo que esperaban los analistas, acelera el cambio en la industria de las telecomunicaciones, cada vez más competitiva y necesitada de nuevos productos para crecer.
El sector de la telefonía móvil en Estados Unidos confía ahora en el tirón de las tablets electrónicas para contrarrestar el frenazo en “teléfonos inteligentes”, que están alcanzando su nivel de saturación, y ha llevado a que el mercado móvil crezca por primera vez por debajo del 2,5% en el segundo trimestre de este año.
El consejero delegado de Verizon, Lowell McAdam indicó en un comunicado que “la transacción fortalecerá el valor en todas nuestras plataformas y permitirá que Verizon opere de manera más eficiente”, algo que recordó se enmarca en un mercado que demanda más productos multimedia en líneas de banda ancha por la extensión de los llamados “smartphone”.
La británica Vodafone poseía el 45% de Verizon Wireless, la mayor compañía de telefonía móvil estadounidense en cuanto al número de suscriptores, desde 2000, cuando ambos gigantes del mercado de las telecomunicaciones formaron una alianza conjunta.
No obstante, durante años, y con especial intensidad en los últimos meses, Verizon ha intentado tomar el control total de su filial de servicios móviles para aprovechar la rentabilidad en uno de los mercados de telefonía más grandes y maduros del mundo.
Por su parte, Vittorio Colao, el consejero delegado de Grupo Vodafone, explicó que “esta transacción nos permite, tanto a Vodafone como a Verizon, ejecutar nuestros planes a largo plazo, después de que las compañías hayan tenido una duradera y exitosa asociación que ha llevado a Verizon Wireless a líder de su mercado”.
La operación marca una nueva etapa para Verizon, que comenzó con su alianza con Vodafone a invertir en el mercado de telefonía móvil cuando este servicio comenzaba a popularizarse y extenderse, y ahora busca integrar sus operaciones para responder mejor a un mercado cambiante.
Con el control total sobre las operaciones de su servicio de telefonía móvil, la empresa con sede en Nueva York estará mejor posicionada para combinar nichos de negocio, invertir y hacer frente a su gran competidor en Estados Unidos, AT&T.
Verizon se encuentra en una reñida competencia en EE.UU. con ATT, el segundo proveedor de telefonía inalámbrica en el país, y otros rivales menores como Sprinter que ofrecen planes más baratos para los usuarios.
Verizon Wireless es resultado de una empresa conjunta iniciada en 1999. La porción de la compañía en el Reino Unido se ha apreciado sustancialmente durante la última década al tiempo que el valor de sus otros activos europeos caían, aumentando el precio que Verizon eventualmente tendría que pagar para adquirir la propiedad completa de Verizon Wireless.
Verizon buscó varias veces a lo largo de los años la compra de su socio, pero el precio del pacto era un obstáculo junto con la perspectiva de que Vodafone tuviese que pagar una gran suma en impuestos sobre las ganancias en una venta.
Fuente: EFE