Instaplan es una empresa de climatización industrial fundada en 1998, que hace aproximadamente dos años inició una completa reestructuración de sus sistemas informáticos, lo que posteriormente dio paso a la implementación de su primera sala de servidores. Un proyecto que significó un gran salto tecnológico para la compañía, que agilizó sus comunicaciones y le otorgó la seguridad que necesitaba para sus datos. Todo esto, con el respaldo de Covenco, proveedor nacional que desde un principio comprendió las características y necesidades de la empresa, y adecuó su oferta y servicio a éstas. Así lo explica Juan Enrique Stauffer, Jefe de Informática e Infraestructura de Instaplan.
El proyecto de modernización de Instaplan comenzó en el 2006 con la estandarización de toda su plataforma informática, año en que la empresa experimentaba las dificultades de una abundancia de formatos y computadores sin licencias, entre otros problemas. Se definieron entonces tipos de procesadores, capacidades de memoria RAM, clases de placas madre y el mismo sistema operativo para todos los usuarios. Con estas medidas, la empresa logró disminuir en gran medida las complejidades en la transmisión de datos a través de la red, provocadas por las incompatibilidades entre las distintas plataformas operativas.
Ya con esta fase estable, iniciaron la segunda etapa que consistía en instalar servidores. “Lo que queríamos era tener una sala de máquinas pequeña, una especie de proyecto a escala, que nos entregara todo lo que necesitábamos, pero tomando en cuenta el tamaño de la empresa y nuestro nivel de operaciones”, explica Stauffer.
De esta forma, en Instaplan buscaban asegurar sus datos y respaldarlos en los servidores con un cien por ciento de continuidad operacional en los computadores de los clientes. Para ello, requerían contar con controladores de dominio y servidor de archivos. Todo esto, junto con el firewall y la telefonía IP ya existentes, se enmarca en un proyecto más grande cuyo objetivo es ampliar las operaciones de la compañía a todo el territorio nacional.
En relación a los servidores de archivos y controladores de dominio, la firma comenzó investigando soluciones basadas en Windows, porque era el entorno operativo más familiar para los usuarios. En este camino conocieron el sistema operativo OpenSource de Red Hat, que luego les planteó la necesidad de contar con una empresa chilena que implementara el proyecto y les brindara soporte.
Solidez, respaldo y confianza
“Hace un tiempo -recuerda el ejecutivo- participamos en una actividad de la Cámara Chileno-Alemana de Comercio e Industria -de la cual somos miembros-, donde Covenco hizo una presentación que me llamó mucho la atención porque se trataba de una compañía chilena, de larga trayectoria, que daba soporte sobre Linux”.
Así se gestó la relación entre ambas empresas, la que luego dio paso a una implementación que al poco tiempo mostraba sus primeros beneficios y que en la actualidad tiene a Instaplan evaluando la firma de un contrato de mantención total.
Puntualmente, el proyecto desarrollado por Covenco se implementó sobre dos servidores con sistema operativo Red Hat Linux Enterprise 5 e implicó instalar un controlador de dominio y un servidor de archivos, ambos con 100% de redundancia y alta disponibilidad, mediante la tecnología DRBD (Distributed Replicated Block Device) y el software Heartbeat.
“En este contexto, yo me convertí en el administrador de un sistema para el cual contamos con el total respaldo de un especialista como Covenco, que nos entrega la tranquilidad de que todo está funcionado como corresponde”, explica el Jefe de Informática e Infraestructura de Instaplan.
La implementación
A principios de este año se inició el proyecto de implementación, comenzando con una serie de reuniones entre ambas partes para determinar con claridad cuál era la mejor solución para Instaplan, un proceso en el que Stauffer sostiene haberse sentido siempre muy interpretado en las necesidades de la compañía, y en el cual valora la participación de Covenco, que aportó siempre con una mirada muy acertada. El ejecutivo detalla que la ejecución se desarrolló sin trabas; las máquinas llegaron directamente a Covenco, donde se realizó la configuración para luego trasladarlas hasta las instalaciones de Instaplan.
“Finalmente, lo que hicimos fue unir los equipos Windows de los clientes con los servidores Linux, lo que en la práctica no significó un gran cambio para el usuario. Nos planteamos esto paso a paso, sin exponer a los usuarios a cambios radicales para los que aún no están preparados”, asevera.
A nivel de servicio, para Instaplan, Covenco es un partner que entrega toda la ayuda necesaria, desde el inicio del proyecto hasta su puesta en marcha, demostrando un gran manejo técnico, comprensión de las necesidades y el tipo de negocio que enfrenta y un fuerte sentido de la responsabilidad.
A juicio de Stauffer, la principal razón que los hizo elegir a Covenco fue su permanencia en el tiempo y la serie de proyectos exitosos que ha desarrollado. “Cuando uno busca a un socio de este tipo en lo que más está pensando es en que te acompañe siempre y que no desaparezca a la mitad de la implementación o que luego no esté en condiciones de entregar soporte. En ese sentido, Covenco es una empresa de prestigio que, además de contar con un alto nivel de especialización, nos dio la confianza y estabilidad que necesitábamos. Y no nos equivocamos”, enfatiza.
En la actualidad, se encuentran ‘ad portas’ de terminar con la puesta en marcha del proyecto, con un 50% de la empresa trabajando con la filosofía de los nuevos servidores.