Alfonso Barraza, Presidente del PMI, Capítulo Santiago, Chile: “La gestión de los stakeholders en proyectos tecnológicos es un área de conocimiento muy interesante de profundizar”

Si bien el porcentaje de fracaso en la gestión de proyectos tecnológicos ha disminuido con el tiempo, principalmente por el uso de “best practices” y metodologías, un elemento clave a considerar es la claridad que existe del alcance de la iniciativa y su adecuada comprensión por parte de todos los stakeholders involucrados.

Publicado el 31 Oct 2018

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Alfonso Barraza.

¿Cómo han evolucionado los proyectos tecnológicos en cuanto a su éxito o fracaso?
La verdad es que el porcentaje de fracasos ha disminuido durante el tiempo, y eso se debe, principalmente, a que se han afinado temas relacionados a metodologías y buenas prácticas. Nuestra organización difunde buenas prácticas en gestión de proyectos, las que plantean un marco de referencia para disminuir la probabilidad de fracaso de un proyecto con una mirada de mediano y largo plazo.

Por otra parte, las metodologías son una forma de llevar proyectos según lo que en ese momento la tendencia indica y la tecnología permite.

¿Existen cifras respecto al uso de metodologías y resultados?
Desde esta perspectiva, podemos decir hoy día que el 55% de los proyectos tecnológicos que son abordados con una práctica Ágil son más exitosos que aquellos que no se abordan con una metodología Ágil, mientras que un 24% está bajo la línea de éxito. En tanto, se ha registrado un 71% de éxito en proyectos que incorporan buenas prácticas v/s un 23% de fracaso.

¿Cómo se definen los puntos de fracaso?
Hay tres indicadores principales: alcance, tiempo y costo. El tiempo es bá- sicamente lo que demora en desarrollar el proyecto y en la medida en que te desplazas hacia delante o hacia atrás hay un éxito o un fracaso.

El costo lo determina el presupuesto y el éxito o fracaso está medido en virtud de la desviación que tengas respecto del presupuesto inicial.

El alcance es un poco más complejo y tiene que ver con la dimensión del proyecto en términos de sus características, funcionalidades, capacidades y envergadura.

En resumen, alcance, tiempo y costo son las medidas por las cuales uno puede evaluar el éxito o fracaso de un proyecto y los errores o falencias que se dan en cualquiera de estas tres áreas.

¿Cuál es el principal factor de fracaso de un proyecto TI?
En los proyectos tecnológicos, fundamentalmente lo que prima es el alcance, en especial cuando este es difuso o no está bien definido o entendido por todos los stakeholders involucrados en el proyecto. Es un problema de expectativas por el lado del mandante, y de ofrecimiento y de propuesta de valor por el lado del oferente. Es una pugna permanente, constante y muy común, cuando la tecnología es desconocida por parte de quien tiene la expectativa y cuando es sobrevalorada por parte de quien la vende.

¿Cómo ayuda el PMI a superar estas falencias?
PMI es una organización que cumple 50 años en el mundo y 20 en Chile. Lo que básicamente impulsa es un conjunto de buenas prácticas en las más diversas dimensiones y en los más diversos tipos de proyectos, es decir, es una guía de referencia global en gestión de proyectos. Desde esta perspectiva, el PMI ofrece 8 distintos tipos de certificaciones orientadas a personas y profesionales, no a organizaciones, siendo la más conocida la certificación PMP (Project Management Professional), que acredita que una persona está capacitada para gestionar proyectos de cualquier tipo.

A su vez, existe otra certificación ligada a temas Ágiles, que se acomoda mucho a proyectos tecnológicos que suelen tener alcances muy inciertos, y que se llama Agile Certified Practitioner (ACP). Pero cualquiera sean las prácticas que se utilicen, estas certificaciones y los conocimientos compartidos a través del PMI tienden a disminuir considerablemente la probabilidad de fracaso en un proyecto, considerando que esta es una organización de clase mundial, que permanentemente realiza benchmarking de qué es lo que se está haciendo en gestión de proyectos y, sobre eso, extrae lo más probado para implementar ciertas prácticas de gestión.

¿Cuáles son las buenas prácticas que más impactan en un proyecto TI?
El PMBOK, la guía de referencia en gestión de proyectos que más se lee en el mundo, incluye una sección denominada Gestión de los Stakeholders, que a mi juicio es fundamental para que todos los interesados estén alineados con el proyecto que se está gestionando. En la medida en que yo sepa gestionar bien el proyecto voy a tener un grado de comunicación directo y fluido de las expectativas.

No digo que sea la única solución; ciertamente hay muchas otras áreas de conocimiento que hay que considerar. Sin embargo, la gestión de los stakeholders en proyectos tecnológicos es un área de conocimiento muy interesante de profundizar y dominar.

¿Hay más conciencia de la importancia de certificarse?
La certificación PMP ha ido creciendo en forma orgánica, pues hace aproximadamente 15 años se internalizó como un apalancador de mejoras laborales. Hoy en día, un profesional certificado PMP puede ver un incremento de hasta un 30% en la remuneración v/s un profesional que no lo es, y eso claramente es un indicador de mejoras de las oportunidades laborales.

Sin embargo, el interés se ha visto con más notoriedad en las certificaciones ACP. La virtud de esa certificación es que dentro de su área de conocimiento incorpora todas las metodologías Ágiles que existen en el mercado, como Lean, Kanban, Scrum y otras. Es decir, la certificación ACP engloba varias metodologías Ágiles, por lo que ofrece una mirada holística un poco más integral, y el interés por este tipo de certificaciones ha crecido favorablemente porque son más fáciles de conseguir que las buenas prácticas de PMI, cuya prueba tiene una tasa de fracaso de aproximadamente un 40%.

¿Cómo se compara Chile con el resto de Latinoamérica en certificaciones?
En Chile sucede un fenómeno muy local y es que los profesionales no son muy proclives a las certificaciones internacionales, excepto en unas pocas profesiones que fuerzan la certificación y acreditación internacionales, como es el caso de aquellas relacionadas con el área tecnológica.

La migración profesional que hemos visto en el último tiempo ha impulsado notoriamente el interés de los ejecutivos chilenos por certificarse. Hoy vemos que profesionales que provienen de distintos países, entre ellos Perú, Bolivia y, especialmente Venezuela, están certificados y generan una presión por contar con una acreditación que ya se ve en nuestro mercado.

Estos profesionales vienen altamente calificados no solo en temas tecnológicos, sino que cuentan también con varias certificaciones y maestrías en su currí- culum, lo que impacta positivamente en el interés por esas acreditaciones, que ya se han convertido en parte del estándar.

¿Qué nos puede contar del Tour Cono Sur de este año?
El Tour Cono Sur concentra en el mes de noviembre una gran cantidad de congresos en distintos países de la Región, y Chile será el escenario de este el próximo 14 de noviembre, donde hablaremos principalmente sobre metodologías Ágiles y el renacimiento de proyectos intensivos influenciados por la tecnología y la transformación digital.

Más de 100 países están asociados con sus respectivos “Capítulos” al Project Management Institute (PMI), una entidad que se define como responsable de entregar valor a casi 3 millones de profesionales mediante entrenamientos, colaboración, educación e investigación, y que el 14 de noviembre tendrá su conferencia anual en Santiago como parte del Tour Cono Sur del PMI.

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Redacción

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