¿Cuáles son las falencias que aún existen en conectividad en Chile?
Si bien Chile muestra buenos indicadores de desarrollo en esta materia, la ambiciosa meta de tener brecha cero junto -con los desafíos de modernizar lo existente, avanzar en cobertura y hacerlo atractivo para el sector privado- configuran una tarea de mayor complejidad.
Conectar a los que faltan a la red mundial de Internet parece sencillo, pero es una tarea compleja, ya que se requiere de inversiones en infraestructura de red para soportar el tráfico actual y el emergente. Este, a su vez, también va cambiando con el desarrollo de las tecnologías como IoT (Internet de las Cosas) y 5G, no solo para ofrecer mayores velocidades, sino también para que la red comparta sus servicios con millones de dispositivos terminales.
Según lo señalado por Claudio Araya, Subsecretario de Telecomunicaciones, las cifras muestran los avances y las necesidades en materia de brecha digital: “La OCDE nos destaca como uno de los países con mayor crecimiento en materia de conexiones fijas a fibra óptica, las que representan 59,7% de conexiones fijas en el país. En materia de conectividad móvil, existen 20,4 millones de usuarios 4G”, y agrega que, hasta abril de este año, existían 4,3 millones de conexiones fijas, con una penetración por hogar del 61,8% (Diario Financiero, Agosto 2022).
¿Como ha crecido la exigencia hacia las redes por una mejor infraestructura a raíz de las nuevas tecnologías?
El desarrollo de la sociedad, en todos sus ámbitos, así como de la economía y la industria empujadas por la pandemia, han sido los gatillos para modelar el crecimiento de la demanda de servicios y sus nuevas exigencias técnicas y funcionales.
La Subsecretaria de Telecomunicaciones (Subtel) muestra los datos de crecimiento de acceso a Internet y que permiten proyectar la evolución de algunos servicios tales como teletrabajo, la teleducación y el entretenimiento. (Ver a la izquierda gráfico Internet). A lo anterior se suma la evolución de las redes sociales con mayores exigencias de interacción y uso masivo de streaming de video.
¿Qué nuevas tecnologías exigen más a la infraestructura de redes?
Sin duda, la masificación del acceso al cableado por fibra óptica y la de servicios móviles liderados por 5G. Internet de las Cosas (IoT) también demanda mayores velocidades y menores tiempos de respuesta.
La migración de la televisión y los videojuegos a las redes de telecomunicaciones constituye una fuerte presión por disponer de “autopistas” de gran capacidad en las redes.
¿Por qué la fibra óptica es la opción actual? ¿Cuáles son las ventajas?
Hasta no hace muchos años, la fibra óptica era una tecnología exclusiva y de alto costo. Hoy es casi la única opción confiable y rentable para brindar servicios a clientes y usuarios de telecomunicaciones.
Las razones las tienen dos aspectos: las enormes ventajas de la fibra óptica como medio de transmisión con altas capacidades de transporte de información, así como por su inmunidad al ruido e interferencias y también por sus bajas pérdidas por distancia.
Los bajos costos de la fibra y de sus componentes y accesorios, así como de la instalación y mantenimiento, permiten en la actualidad su despliegue en forma masiva e incluso para el reemplazo de otras tecnologías vigentes (par de cobre con ADSL o coaxial con HFC-Docsis).
¿Cuáles son las tendencias, en este sentido, en materia de tecnología?
En materia de equipos terminales las tendencias continúan concentrándose en dotar de mayor potencialidad a los equipos móviles, sin dejar de lado la natural evolución de computadores, notebook, tablet, televisores, cámaras y una infinidad de dispositivos y aparatos de todo tipo “conectables” a redes (electrodomésticos, automóviles, máquinas, sensores, actuadores, etc.) En materia de servicios, el acceso a Internet predomina y, como tecnologías, predominan las de redes fijas lideradas por la fibra óptica y las móviles lideradas por el 5G. El cuadro a la derecha muestra esta evolución.
¿Cómo beneficiará esto a las empresas?
El disponer de acceso a mayores velocidades en las redes permite hacer posible la utilización de nuevos servicios con mayores beneficios para las empresas y sus clientes. Por ejemplo, transacciones comerciales con mayor uso de multimedia.
A las compañías les da la posibilidad de mejorar los medios y la calidad de la comunicación con sus clientes y proveedores, así como facilitar el teletrabajo si lo consideran conveniente para sus actividades.
El disponer de proyectos subsidiados por el Estado, como por ejemplo el FON, permite reducir costos para los operadores y que, a su vez, lo transfieran a sus clientes residenciales y empresas.
¿Cuáles son las nuevas aplicaciones que debieran despegar?
En el caso residencial, despegarán todas aquellas aplicaciones de uso masivo y aquellas demandantes de mayores velocidades y ancho de banda, como por ejemplo los servicios de streaming que permiten reemplazar las redes tradicionales de TV cable.
En el caso empresarial, el uso de aplicaciones de mayor exigencia de ancho de banda, así como lo del sector industrial identificado como Industrias 4.0. Es decir, despegarán soluciones enfocadas en la interconectividad, la automatización y los datos en tiempo real.
¿Por dónde falta avanzar en conectividad?
El reto es disponer de la infraestructura base (redes de transporte masivo de alta capacidad y velocidad). A partir de ella se desarrolla la red de acceso y distribución para llegar a los usuarios finales.
