Quién diría que la acelerada evolución de la Inteligencia Artificial y su rápida adopción la han convertido en una de las revoluciones más relevantes a nivel empresarial en el último año y, seguramente, lo será aún más en los venideros. Al menos, así lo indican distintos informes y documentos que se han publicado últimamente.
Pero, ¿estamos preparados en Chile? ¿Cuánto hemos avanzado desde el surgimiento de este gran “boom” tecnológico? A decir verdad, la adopción de la IA en las empresas chilenas ha sido lenta. ¿La razón? Estamos en un momento económico donde muchas de las compañías están enfocadas en la estabilidad operacional, llevándolas a dirigir todos sus esfuerzos en soluciones “conocidas” para buscar mayor eficiencia en sus procesos.
Y si bien hay interés en la aplicación de distintas herramientas de IA, existe poca comprensión en el mercado acerca de los beneficios que esta herramienta puede traer. De hecho, sólo un 22% de los trabajadores chilenos poseen las habilidades que se potenciarán con la revolución de la IA.
Desde WISE Innovation Studios tenemos nuestro diagnóstico y en relación a ello, vemos que las empresas, en general, hoy no están invirtiendo mucho en este campo. Sin embargo, están generando cada vez más pilotos, por lo que desde nuestra experiencia podemos decir que una vez que visualizan el potencial que tiene la IA, la decisión a escalar es prácticamente inmediata, tratándose de una fuerte e irrenunciable (hasta ahora) tendencia mundial.
Es por esto que nos encontramos apoyando a grandes empresas a crear ecosistemas, plataformas, soluciones y llevar a cabo pilotos, que les permitan liderar su nicho en los próximos 10 años.
En el caso del marketing y la publicidad hemos desarrollado grandes apuestas exitosas. Entre ellas destaca la construcción de la antorcha gigante sobre la Torre Entel durante los Juegos Panamericanos Santiago 2023, gracias a la cual generamos una experiencia impactante a través de la IA, logrando no sólo un gran alcance orgánico para la marca, sino también a nivel de audiencias. ¡Alcanzamos más de 10 millones de reproducciones en sólo 3 horas!
Algo similar hicimos con Pepsi, mediante una lata gigante que viajó por Santiago durante todo un día recorriendo las calles hacia el afamado festival de música Lollapalooza, haciendo posible más de 8 millones de reproducciones en un par de días. Todo esto nos habla de logros y números de engagement que la publicidad tradicional nunca había visto.
Otro aspecto realmente disruptivo apunta a eliminar la barrera técnica entre la tecnología y el humano, permitiéndole a este último comunicarse de manera directa (en lenguaje natural) con dicha tecnología, sin tener que depender del área técnica. El mejor ejemplo de esto es nuestro partnership con AI. KNOW & Chata AI.
Esta herramienta, hoy disponible exclusivamente para toda Latinoamérica, permite democratizar el acceso a los datos de las empresas y producir una conexión con todos los trabajadores en distintos niveles de seguridad y accesibilidad, con el objetivo de que todas las decisiones que se tomen sean basadas en datos, no en intuición, acotando de esta manera los tiempos de respuesta de dos semanas a solo segundos.
Así las cosas, la IA ofrece una gran oportunidad para diversificar la economía chilena y enfrentar los desafíos de la globalización. Un estudio de McKinsey releva el potencial de la IA generativa (rama de la IA), indicando que su impacto en la economía chilena podría traducirse en $40.000 millones a largo plazo, debido a la capacidad que posee de transformar sectores clave. Además, su adopción podría impulsar el surgimiento de nuevas industrias y servicios basados en tecnología, como la robótica, la ciberseguridad, la realidad virtual y la salud digital.
Vemos que en Chile hay mucho talking y poco walking. Las empresas están estáticas por falta de conocimiento real de las herramientas disponibles y soluciones reales que trae la AI. Y ahí está el problema, están estáticas por que al no tener una agencia o partner que los nutra constantemente de este tipo de avances, tecnologías y usabilidad, no pueden tomar decisiones correctas. Así, adoptan una posición estática y luego, al ver como pasa el carnaval de otros que si están actuando, dicen ¿y por qué nosotros no estamos haciendo algo?
Por tanto, las empresas que no incorporen este tipo de tecnología, ya sea en proyectos de escala o en pilotos, prontamente quedarán fuera de la carrera, al menos en cuanto a productividad. Y hoy más que nunca Chile necesita ser un país más competitivo y atraer nuevas inversiones, sofisticando sus procesos de la mano de soluciones de última generación, como la IA y sus múltiples aplicaciones.
