Es muy difícil imaginar todos los datos que pueden llegar a obtenerse de los 618 millones de dispositivos – sin contar los teléfonos – que actualmente están conectados a las plataformas AIoT (Artificial intelligence of things) de Xiaomi, ya que es inmenso el volumen de información que una red de dispositivos puede generar segundo a segundo.
Si bien la obtención de datos se puede hacer de forma casi inmediata, el procesamiento de esa información aún es lento. Aquí es donde la AIoT comienza a tener sentido. En términos simples consiste en dispositivos, como electrodomésticos o ecosistema de tecnología de consumo en general, que pueden interactuar con su entorno; además aprender y adaptarse a las necesidades de los usuarios. Esta “convergencia” de tecnologías y soluciones permite desarrollar redes y sistemas “pensantes” que cada día pueden resolver mejor una amplia gama de problemas en una diversa cantidad de industrias.
Mientras la Internet de las cosas (IoT) recolecta información y actualiza las bases de datos, la Inteligencia Artificial (IA) analiza e interpreta los datos para encontrar patrones, realizar predicciones y tomar mejores decisiones al instante, algo que será crucial para ser más eficientes y eficaces a la hora de interpretar las necesidades de las personas. También, permitirá que los fabricantes de tecnología podamos conocer de mejor forma a los usuarios, sus hábitos y comportamientos, saber por dónde debemos innovar y conocer de mejor forma el funcionamiento del mercado.
Como resultado final, las compañías de tecnología buscamos que las personas puedan acceder a mejores servicios y así tomar mejores decisiones. Además, al automatizar de forma inteligente los procesos secundarios podremos centrarnos en temas que influyen en el funcionamiento y ofrecer una mayor personalización para los usuarios.
Fuera del mundo de la tecnología de consumo, ya podemos ver ejemplos cercanos de lo anterior en sectores como la minería, agrícola y en la salud, que han desarrollado pilotos e incluso han implementado soluciones tecnológicas basadas en AIoT.
Por lo mismo, quienes desarrollamos productos para las personas en general debemos seguir apuntando a una innovación constante que nos permita seguir interpretando de la mejor manera posible, el crucial papel que está jugando, hoy en día, la AIoT en el desarrollo de tecnología de consumo y así facilitar la vida de los usuarios.