“El cumplimiento tributario parece una cumbre cada vez más alta para las empresas chilenas. El Servicio de Impuestos Internos (SII) no sólo ha aumentado la fiscalización a partir de los recientes cambios legislativos, también las nuevas tecnologías están teniendo un papel importante en las exigencias fiscales”, señala en una reciente columna de opinión Claudia Valdés Muñoz, gerente general de BBSC.
Según indica la ejecutiva, hoy en día la inteligencia artificial puede analizar las glosas de las facturas, lo que facilita la identificación de discrepancias de forma más efectiva. En realidad, un fundamento de la Ley de Cumplimiento Tributario es la comparación de los giros de actividad económica con la base de datos del SII. Esta estrategia busca detectar discrepancias entre las actividades que están registradas y las operaciones que se llevan a cabo.
“Así, todo lo que no cuadre con los registros se convierte en un riesgo inminente de cara al organismo fiscalizador. La nueva norma aborda una serie de aspectos, entre ellos, el máximo de 50 transferencias del que tanto se ha hablado. Pero, la ley va mucho más allá, pues, incluye el tratamiento de gastos empresariales que podrían cuestionarse, como los pagos en hoteles, restaurantes y pasajes de avión, por ejemplo”, expresa Valdés.
La gerente general de BBSC acota que una muestra de la estricta legalización del SII es que ha comenzado a informar a los contribuyentes cuando las glosas son difíciles de leer o las adquisiciones en algunas categorías parecen dudosas. Hasta información particular acerca de los gastos de negocios está siendo cuestionada por la autoridad.
“De ahí la importancia de un manejo correcto y actualizado de la información tributaria. Y es que, frente a cualquier diferencia de criterio, el SII podría cobrar el IVA que los líderes empresariales no habían considerado, lo cual podría acarrear problemáticos costos”
“En un escenario en que la tecnología y las normativas fiscales están estrechamente conectadas, la adaptación debe ser inmediata. Reaccionar a tiempo evitará sanciones y garantizarán un cumplimiento tributario adecuado. Sin importar el tamaño de la empresa, en BBSC creemos que la asesoría durante 2025 será clave”, concluye Claudia Valdés Muñoz.
