En agosto de este año el ámbito público y privado se dieron la mano con el fin de sacar adelante un ambicioso sueño: desarrollar productos y servicios de origen 100% chileno y de alto valor agregado. La iniciativa, denominada Sixlabs, se levanta como el primer Consorcio Nacional de Investigación en Tecnologías de la Información y Comunicación, y en éste participan representantes de Innova Chile de Corfo, la empresa Sixbell Nekotec Solutions, la Fundación para la Transferencia Tecnológica (Untec) de la Universidad de Chile y Commlogik Corporation, representante de Intel.
Sinergias públicas y privadas
Sixlabs surgió como un proyecto de tres años de duración y un total de US$5 millones de inversión, de los cuales Innova aportó el 50%, en el marco de la “Convocatoria para la Innovación Asociativa en Tecnologías de Información y Comunicaciones” que realizó a través de la Subdirección de Innovación Empresarial el año 2005. “El proyecto fue seleccionado luego de un proceso de evaluación que incluyó la participación de expertos internacionales, porque la propuesta mostraba una fuerte potencialidad a nivel global y planteaba de manera adecuada un consorcio para participar de forma activa en dicho negocio, el cual requiere de robustas capacidades de investigación y desarrollo”, según explican en la entidad pública.
El otro 50% del financiamiento fue aportado por miembros del consorcio, las cuales se unieron en esta etapa con el fin de investigar y desarrollar componentes y servicios de valor agregado para la nueva generación de redes de telecomunicaciones IMS (IP Multimedia Subsystem) como objetivo central. Todo lo anterior, sustentado en la fusión de distintas experiencias, donde Sixbell Nekotec Solutions aporta el desarrollo de soluciones para telecomunicaciones; Intel, a través de Commlogik, la plataforma tecnológica; y Untec, el soporte para la investigación.
De servicios tradicionales a aplicaciones innovadoras
Para Américo Tomé, Gerente de Plataformas de Intel, la creación de Sixlabs responde a las tendencias actuales de la industria y la tecnología, “que indican que hay una convergencia entre las plataformas de computación y telefónicas, que requieren de un alto potencial de mercado para la generación de servicios y otros productos de valor agregado basados en tecnología IMS y que representan una gran oportunidad de negocio”.
En este contexto, Sixlabs apunta a desarrollar una plataforma dinámica, flexible y escalable, que permita el despliegue de una red IMS de telecomunicaciones sobre la cual se pueda investigar en torno a la creación de nuevos servicios, realizar pruebas de conceptos y desarrollo de aplicaciones comerciales, con propuestas innovadoras. Junto con esto, se busca lograr la sustentabilidad económica del consorcio en el largo plazo, mediante la apropiabilidad y transferencia al mercado de los productos y servicios desarrollados. Así, el principal valor de la iniciativa es que permitirá crear tanto capacidades científico-técnicas como empresariales para el desarrollo de servicios IMS, un negocio de alcance mundial, según destaca Innova Chile.
Para René Caracci, Subgerente Corporativo de Sixbell Nekotec Solutions, “la meta es convertirse en líder y referente en el mercado latinoamericano de plataformas convergentes de valor agregado de telecomunicaciones, mediante la creación de productos innovadores, de calidad y de gran aporte para el cliente final, para lo cual se generará un proceso de desarrollo de software iterativo enfocado a la productividad, rentabilidad y calidad”.
IP Multimedia Subsystem
Patricio Inostroza
IMS se define como una arquitectura para el soporte de servicios multimedia y VoIP, diseñada para diferentes métodos de acceso (GSM, GPRS, CDMA2000, WLANs y banda ancha alámbrica), que permite la convergencia de servicios fijo-móviles; y la capacidad de habilitar servicios usuario-usuario, usuario-múltiples usuarios y usuario-contenido (texto, voz, video y datos). IMS también habilita la interacción entre las distintas aplicaciones, servicios y la rapidez en el desarrollo de otras nuevas.
En la práctica, el proyecto se ejecuta a través de un grupo de ingenieros altamente calificados, los que trabajan desde marzo de este año en su desarrollo. Durante los tres años que comprende esta primera etapa, se contempla la comercialización de las tecnologías desarrolladas en toda Latinoamérica, utilizando la plataforma comercial que tiene Sixbell Nekotec Solutions en la Región.
Los múltiples servicios que desarrollará el consorcio se enmarcan dentro de las líneas de migración de prestaciones tradicionales a IMS (prepago, calling card, AMP u otros); así como otros de tipo avanzado (IP centrex, desktop assistant y roaming móvil-fijo, entre otros) y la introducción de servicios innovadores (entre éstos, colaboración y control de acceso). Destacan el desarrollo del video sharing online o ‘see what i see’, nuevas aplicaciones multimedia, transmisión de datos de las redes actuales y prestaciones basadas en la información de disponibilidad y localización de los clientes que poseen las operadoras, que permitirán desarrollar nuevos servicios y modelos de negocio.
De esta forma, los primeros servicios que se implementarán corresponden a la evolución de aquéllos tradicionales a las nuevas redes: prepago, VPN, cobros revertidos y calling card, entre otros; para luego implementar servicios que aprovechen las nuevas funcionalidades de la arquitectura IMS, como presencia, localización y sesiones multimedia.
Dentro de las principales fortalezas de los productos y servicios que promoverá Sixlabs está su oferta de arquitectura abierta con estándares internacionales, que permite la incorporación de redes y prestaciones de la telefonía tradicional, con redes IP de última generación, brindando servicios a estas redes híbridas con la misma plataforma de valor agregado. “Así se provee un camino de evolución natural para los servicios actuales de las operadoras y, a la vez, un mecanismo para implementar otros nuevos e innovadores”, agrega René Caracci.
El soporte de la investigación
Patricio Inostroza, Profesor Asistente del Departamento de Ciencias de la Computación de la Universidad de Chile (DCC), destaca el componente investigativo del proyecto, que comenzó con la creación de éste, en que DCC fue invitado a participar, lo que luego dio paso al desarrollo de productos, donde la evaluación periódica ha sido fundamental. “Es aquí donde el DCC ofrece una interesante participación en cuanto a analizar lo realizado a ampliar la investigación, a fin de encontrar soluciones a diversos problemas. Los productos en desarrollo deberán atender a millones de usuarios a la vez, situación que desafía a quienes ofrecen productos con estas características. Luego, es necesario someter lo que se ha desarrollado a un cuestionamiento orientado a su mejoramiento continuo. Por ejemplo, nuestro Departamento ha participado en la arquitectura del software en desarrollo, y en la evaluación de desempeño de la CPU y memoria que se requiere para soportar situaciones críticas”, asevera.
Para la casa de estudios, la principal motivación para integrar el consorcio fue la posibilidad de pasar de la tradicional forma de hacer investigación a una en la cual es necesario aplicar de inmediato los resultados de la misma. Actualmente trabajan en el proyecto cuatro investigadores del DCC, con grados de Doctor en Computación y Ciencias Aplicadas, que dedican parte de su jornada al consorcio; junto a los cuales hay ingenieros y estudiantes en proceso de titulación, formados en la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile. A este equipo permanente se suman además diversos profesionales para presentar soluciones a problemas específicos.
Desarrollo tecnológico nacional
Desde Innova destacan el excelente nivel de investigación que ha alcanzado el proyecto, el que junto al apoyo tecnológico califican como “de primer nivel… donde la colaboración de la UCH ha sido fundamental y permitirá complementar el conocimiento científico obtenido con la generación de nuevos negocios para empresas chilenas”.
A nivel país, Patricio Inostroza señala que la investigación que se desarrolla en Chile es comparable con la de cualquier país, pero que el problema surge en el volumen que se efectúa considerando los recursos existentes, la masa crítica y el interés de la industria en apoyarla.
René Caracci, por su parte, destaca que las áreas de investigación y desarrollo de las empresas de tecnología en Chile están avanzando en el proceso de investigar y crear tecnología nacional para exportar al mercado global. Sin embargo, si bien algunas empresas están invirtiendo en I+D, los montos de la industria en este sentido son mucho menores que en los países desarrollados, lo que representa una desventaja al momento de competir globalmente. “Creemos que proyectos como Sixlabs y otros que está desarrollando el Grupo de Integradores de la ACTI, ayudan a la industria a avanzar en el proceso de generar innovación en Chile. El que una compañía chilena invierta de esta forma en I+D demuestra que vamos en la dirección correcta y esperamos que con el tiempo tengamos muchos otros proyectos como éste aportando a la creación de tecnología ‘made in Chile”, concluye.
