Narrar Chile al mundo, a partir de sus atributos más relevantes. Esa es la misión que se ha propuesto Fundación Imagen de Chile, entidad que busca coordinar la acción de los distintos organismos estatales responsables de la promoción sectorial internacional con los del área privada para optimizar el posicionamiento de Chile en el mundo. Parte fundamental de este objetivo es fomentar la innovación, para lo cual, entre otras iniciativas, creó el programa Red de Talentos para la Innovación, ChileGlobal, una agrupación internacional que busca contribuir al desarrollo del país.
¿Qué significado tiene ser innovador?
Implica tener una visión a largo plazo. No sólo potenciar el desarrollo de nuevos conocimientos y aplicaciones, sino también ser capaces de exportarlos. Mirar el emprendimiento como una condición “sine qua non” para la integración de nuestro país en la economía global.
Chile debe estar conectado intelectualmente al resto del mundo. Precisamente una red como ChileGlobal responde a la necesidad de impulsar y canalizar esta aspiración. La experiencia y compromiso de los chilenos exitosos que residen en el exterior constituye un ventajoso recurso que esta red utiliza, facilitando la creación de valor a través de alianzas y vínculos para desarrollar innovación.
¿Cómo se visualiza el fomento de prácticas innovadoras en el país?
Nos encontramos bien encaminados en esta materia. Por ejemplo, en cuatro años, el país triplicó la inversión en I+D y se convirtió en un referente para el resto de América Latina.
El gobierno de Michelle Bachelet creó en el 2006 el Fondo de Innovación para la Competitividad con recursos provenientes del royalty minero, los que han permitido multiplicar por tres los dineros para investigación en el período 2006-2010. Esta cifra equivale a US$700 millones en cuatro años sólo en inversión pública destinada a ciencia, tecnología e innovación. Es un monto histórico para Chile.
El Gobierno actual ha manifestado su interés en fomentar aún más la capacidad de innovación y emprendimiento y se han creado varios incentivos en esa dirección. Por ejemplo, el programa Start Up Chile, que busca atraer a emprendedores altamente calificados a iniciar sus negocios en Chile, facilitándoles recursos y un ambiente propicio para el desarrollo de sus empresas.
Como promotores de la imagen de Chile en el exterior estamos muy contentos al saber que las publicaciones internacionales comienzan a destacar a Chile como un “país innovador”. Internamente sabemos que aún falta mucho por avanzar en innovación y emprendimiento, pero que Chile aparezca en estas publicaciones es un gran paso si se quiere potenciar la imagen del país.
¿Cuál es la labor de ChileGlobal en materia de innovación?
El programa ChileGlobal ha formado una red internacional de exitosos empresarios, altos ejecutivos y profesionales chilenos que residen en el extranjero y que tienen interés en contribuir al desarrollo y promoción de su país. De esta manera, los chilenos que pudieron innovar en el extranjero, pueden generar lazos con sus connacionales, para ayudarlos a emprender.
ChileGlobal se originó como proyecto piloto del Banco Mundial, hace cinco años, y debido a su impacto a nivel nacional e internacional, la red se trasladó en el 2009 a la Fundación Imagen de Chile. Aquí cuenta con la institucionalidad requerida para continuar ampliando sus operaciones. Existen actualmente redes en Estados Unidos, Canadá, México, Brasil, Argentina, España, Grecia, Suecia y China, y continúa su ampliación a otras áreas geográficas.
La Red de Talentos para la Innovación ChileGlobal es una antena y puente para generar ideas nuevas y transformarlas en proyectos de innovación. Su existencia es una condición indispensable para que el país dé un salto hacia una total integración a la economía global a través de su incorporación a la economía del conocimiento. Para integrarse, Chile debe estar conectado no sólo física y digitalmente, sino también intelectualmente al resto del mundo.
Encuentro de emprendedores con Salomón Suwalsky, dueño de Royal Inc. y miembro de la red ChileGlobal.
La red promueve negocios innovadores, transferencia de conocimiento y tecnología desde y hacia nuestro país, facilitando la generación de nuevas oportunidades, comprometiendo a los actores y buscando los medios para que los negocios y alianzas se concreten. Además, permite constituir una base que allane el acceso a información, experiencias y recursos empresariales, tecnológicos y financieros. Asimismo, permite potenciar un modelo sustentable de desarrollo y funcionamiento de redes que mejoren el capital social y económico nacional.
Específicamente, ¿qué acciones realiza ChileGlobal para motivar la innovación?
Después de cinco años de trabajo, la red ya expone casos exitosos en los distintos programas que promueve. Ejemplo de ello es el programa de pasantías que hoy se está ampliando a nuevas empresas y el programa Global Working que se realiza en conjunto con ChileIncuba, en donde destacados chilenos que triunfan en el extranjero y emprendedores nacionales se reúnen durante una jornada de trabajo y comparten sus experiencias.
Entre estas iniciativas cabe destacar: el Concurso de Diseño Industrial, que busca exportar el diseño nacional a los mercados globales; la formación de empresas innovadoras; y la instalación en nuestro país de empresas extranjeras.
¿Qué desafíos se plantean en este sentido?
Nos planteamos continuar trabajando duro para exportar la innovación y, por supuesto, seguir ampliando nuestra red.
A nivel país, la escasez de recursos privados es el gran talón de Aquiles con el que ha debido lidiar este proceso de fomentar la innovación. Las autoridades del sector destacan el compromiso permanente de incrementar los recursos públicos destinados a I+D, aunque se asume que el gasto total como porcentaje del PIB se encuentra por debajo del 1% y que debería crecer más.
De esta manera, todavía existe una brecha con países desarrollados como Finlandia, donde se invierte un 3,4% del PIB o Canadá que destina el 2%, porcentaje similar al de los países de la OCDE, organización a la que Chile ingresó recientemente. En ambas naciones sólo un tercio de los recursos proviene del sector público, mientras que en nuestro país el porcentaje es el doble. Pese a esta situación, Chile emerge como uno de los líderes en la inversión en investigación, superando a otros países de la Región, como Perú, Argentina y México, que también invierten en I+D con el 0,1%, 0,53% y 0,4% del PIB, respectivamente.
Así, el revolucionario proceso que ha experimentado Chile se explica en gran medida como fruto de una apuesta de Estado que ha contado con la participación activa de importantes sectores de la sociedad. La tarea radica ahora en estimular y aumentar la participación del mundo privado, situación que permitiría a nuestro país alcanzar estándares similares a los de naciones desarrolladas.
