Por Javier Jara, Gerente Legal y de Asuntos Corporativos del Depósito Central de Valores (DCV).
Blockchain se ha convertido en una gran oportunidad para el mercado de capitales, ofreciendo un nuevo enfoque para la gestión y el intercambio de datos. Ya hemos visto cómo este mecanismo de registro no centralizado va posibilitando que múltiples participantes accedan a la misma información, de manera confidencial y segura.
El desafío continúa y se puede avanzar aún más y a mayor velocidad. El trabajo conjunto entre el sector público, privado y académico debe fortalecerse para impulsar la expansión de Blockchain en el sector financiero. Es por eso que, el Depósito Central de Valores (DCV), en conjunto con la Bolsa de Santiago y GTD, creamos el primer consorcio en América Latina que promueve un ecosistema virtuoso para que empresas puedan crear sus propias soluciones basadas en Blockchain, permitiendo lanzar y comercializar aplicaciones en días, no meses.
Con ese mismo fin, el consorcio realizó la primera versión del torneo AUNA Open Challenge, donde invitaron a startups de toda la región a crear soluciones basadas en Blockchain en cinco categorías: confianza, seguridad y transparencia en los trámites municipales; mejoras para las compañías de seguros; identidad digital; desembolsos y agilización de trámites; y una categoría abierta para dar cabida a soluciones.
Muestra de la importancia que tiene Blockchain en la actualidad, es que en el torneo participaron más de 100 startups de ocho países, logrando AUNA aportar en el necesario avance en la generación de sinergias en el trabajo realizado entre las instituciones financieras tradicionales y las Fintechs para impulsar soluciones basadas en esta tecnología. Blockchain es el futuro y presente de la industria financiera. Avancemos juntos, para potenciar su valor y capturar las oportunidades que tiene para Chile.