Mientras el celular, el computador y el televisor estén en casa no generan riesgos de contaminación, pero si se mezclan con el resto de la basura y se rompen, los metales tóxicos se desprenden y pueden causar daños a la salud.
Para facilitar esta tarea están surgiendo en nuestro país algunas iniciativas privadas para reciclar estos artículos electrónicos que no puedan repararse. Una de ellas es la Campaña de Reciclaje Integral a Domicilio que lanzó por tercer año consecutivo el proyecto inmobiliario Piedra Roja –ubicado en Chicureo y vinculado a Inmobiliaria Manquehue–, y cuya jornada se efectuará el próximo sábado 28 de mayo, en todos los condominios del sector. Sólo se debe dejar afuera de cada casa todo el material en desuso para ser retirado por un camión recolector.
Esta masiva operación sustentable orientada a disminuir la basura electrónica está a cargo de la empresa especializada eWaste Recycling Co, quienes recolectan e material electrónico, lo almacenan en contenedores y posteriormente lo envían a empresas recicladoras en USA y Europa que cuenten con las certificaciones ISO 14001, 18001 y la e-Steward Certification, garantizando un reciclaje seguro y amigable con el medioambiente.
Adicionalmente, esta campaña también contempla el reciclaje de ropa, electrodomésticos, línea blanca, muebles, vajilla, ropa de cama y colchones, en alianza con los Traperos de Emaus.
“Piedra Roja siempre ha estado preocupado por el medio ambiente, siendo uno de los primeros barrios en contar con un Punto Limpio en el sector norte de la capital, que en sus cinco años de funcionamiento superó las mil toneladas de material reciclado. Queremos ir más allá, y facilitar a nuestros vecinos diversas instancias que les permitan mejorar su calidad de vida, contribuyendo a tener barrios más sustentables”, señaló Cristián Cominetti, Gerente General de Piedra Roja.
De acuerdo a las Naciones Unidas (ONU), la basura electrónica es un problema mundial con graves efectos sobre la salud humana y la naturaleza. Chile no está ajeno a este fenómeno. Según el último informe de Universidad de las Naciones Unidas (UNU), somos el país que más residuos electrónicos produce por persona a nivel latinoamericano, con 10 kilos al año.
El 81% de este tipo de residuos electrónicos no tiene destino conocido y va a parar a vertederos clandestinos, por lo tanto no recibe el tratamiento adecuado como desperdicio peligroso en plantas especiales.
