Desde hace varios años, el impulso a la robótica vino del auge de los robots industriales para la automatización de los procesos de producción de artículos de consumo masivo. Hasta el momento, no se espera un gran cambio en el predominio de este tipo de robots, a pesar de la evolución de la Inteligencia Artificial.
IDC, firma de inteligencia de mercado, servicios de consultoría y conferencias para el sector de Tecnologías de la Información y Telecomunicaciones, comparte los resultados de su Worldwide Semiannual Robotics Spending Guide, estudio que mide la implementación de los diversos tipos de robots en 20 industrias, y sus casos de uso, donde resalta que el mercado de robots en América Latina cerró 2018 con un valor de US$ 1.040 millones y va en aumento.
Para 2019, se espera que dicho mercado llegue a los US$ 1.266 millones, con un crecimiento del 21% respecto al año anterior, con el 73% de robots industriales, el 27% de robots de servicios y un 0.09% de robots de consumo.
Por otro lado, para 2022 se espera que el segmento de robots industriales abarque un 72% del mercado y siga predominando, pues en la región se encuentran Brasil y México, dos grandes países manufactureros. IDC prevé que este mercado alcance los US$ 2150 millones.
A lo anterior se suman los robots para producción de alimentos, los cuales están ganando terreno debido a la alta demanda de mano de obra para el trabajo dentro de esta actividad.
Los casos de uso más relevantes de los robots industriales son: ensamble, soldadura, mezclado, empaque de productos, inspección y embotellado.
Respecto al segmento de los robots de servicios, los casos de uso más importantes son: empacado, inspección de tuberías, producción agrícola y seguridad. “Estos robots irán creciendo en materia de agricultura, principalmente en la recolección de frutas y verduras, y crecerán también en la modernización de la infraestructura de los países de Latinoamérica”, aseguró Alejandro Floreán, Vicepresidente de Consultoría para IDC Latinoamérica.
De acuerdo con el analista de IDC, en cuanto al sector de consumo, aún hace falta evolución para encontrar casos de uso relevantes, los cuales están siendo precedidos por los asistentes virtuales y los pequeños robots que ayudan en algunas actividades de limpieza en los hogares.
“En las industrias de alto riesgo, como la minería, los robots pueden representar un papel muy importante para garantizar la seguridad de los seres humanos y, además, incrementar la eficiencia en actividades repetitivas”, finalizó Alejandro Floreán.