La infraestructura de medición avanzada (AMI) es una tecnología que reúne sistemas que miden, recolectan y analizan el uso de la energía e interactúan con los dispositivos de medición inteligente de los servicios públicos de electricidad, gas o de agua. Al utilizar estos sistemas, las utilities pueden tomar de decisiones con base en la información de consumo de sus usuarios.
Países como Colombia, Ecuador, Chile y Argentina están planeando una inversión significativa para la modernización de la red. En total, durante el periodo 2015-2025, en Sudamérica se invertirán US$ 22,6 mil millones en la Medición Inteligente, US$ 7,2 mil millones en automatización de la distribución y US$ 8,3 mil millones en otros segmentos del mercado de redes inteligentes.
La Medición Avanzada se logra a través de la interacción de cuatro elementos: medidores inteligentes, un motor de recolección de datos, un sistema de gestión de los datos de medición MDM (Meter Data Management) y un canal de comunicación bidireccional. La recolección y procesamiento de los datos efectuada con tecnología AMI genera información valiosa que es aprovechada en diversos procesos de negocio de los proveedores de servicio, lo que justifica la inversión inicial con los beneficios que genera para las compañías.
Las utilities han encontrado valor en los datos de Medición Avanzada debido a que les ayudan a obtener mayor estabilidad y seguridad en el uso de la red, facilitar a sus clientes la identificación del mejor momento para usar sus propias fuentes de energía, así como para optimizar los costos de sus servicios según los hábitos de consumo.
Jesús Sánchez, Vicepresidente de mercadeo de Open, aseguró: “este tipo de nuevas tecnologías permite a las empresas tener un mayor monitoreo y control del consumo de sus usuarios, reducir costos de operación, identificar ágilmente causas de interrupción del servicio, lograr detección oportuna de fraudes, entre otros”.
Soluciones como Open Smartflex facilitan el proceso de adopción de nuevas tecnologías como la Medición Inteligente, la cual trae beneficios operativos y de servicio al cliente, al tiempo que facilita el cumplimiento de las exigencias regulatorias.
“La Medición Avanzada brinda acceso a grandes cantidades de datos, permitiendo a los proveedores de servicios, mejorar la calidad del servicio prestado y diseñar nuevos planes tarifarios que optimicen el uso de la red y beneficien a los usuarios” concluyó Sánchez.