Actualmente, existe un gran consenso en la industria a nivel mundial sobre los beneficios y funcionalidades de las soluciones informáticas denominadas EAM (Enterprise Asset Management) para la administración de la gestión y tareas de mantenimiento.
El impacto de la implantación de esta tecnología en las empresas se refleja en cuatro objetivos principales: reducción de costos en la gestión de mantenimiento, aumento de la disponibilidad de equipa-miento y líneas de producción, incremento de la vida útil de los activos y disminución de stock (considerado como la inversión en repuestos y maquinaria que permanece en tiempo de parada).
Si bien son muchas las organizaciones que ya han implementado esta tecnología en sus procesos de negocio con óptimos resultados, la tendencia natural para lograr los máximos grados de rentabilidad, eficiencia y colaboración entre las empresas, empleados y proveedores, tiene que ver con la posibilidad de acceder a los sistemas e información crítica vía Internet, abriéndose un nuevo abanico de potencialidades y beneficios.
El primer paso estuvo dado por la comercialización de aplicaciones a través del modelo ASP (Application Service Providers) que permite acceder a esta solución a través del web mediante pago de una renta mensual, constituyendo el punto “natural” de convergencia entre la evolución de la infraestructura de Internet y el software de aplicaciones.
De esta forma, al adquirir una solución EAM bajo esta modalidad ya no es necesario preocuparnos del software, hardware o la plataforma, ni realizar las tareas de implemen-tación, ya que sólo se paga por el uso de la aplicación, lo que se traduce en una reorientación de los recursos humanos y financieros al verdadero foco de nuestro negocio.
Tecnología móvil: Una línea directa a mayor productividad
Partiendo de esta convergencia natural entre el ambiente Internet y las soluciones EAM, el siguiente paso consiste en la posibilidad de acceder en tiempo real y desde cualquier dispositivo conectado a la red, a toda la información que permita gestionar el funcionamiento de los activos de una planta industrial, fábrica o empresa, sin importar la hora y el lugar donde se encuentre el responsable de mantenimiento.
Esto constituye un enorme valor para aquellas actividades como la minería, telecomunicaciones, yacimientos petrolíferos, grandes industrias o empresas de transporte, por citar algunos ejemplos, que deben administrar activos móviles de gran valor e instalaciones extensas o dispersas geográ-ficamente, por lo que requieren mayores estándares de precisión sobre los datos y una total disponibilidad de éstos.
Concretamente, desde cualquier handheld, teléfono celular o dispositivo conectado a Internet es posible acceder a la fuente de conocimiento que permite realizar el seguimiento de los activos, establecer un contacto permanente con el personal de mantenimiento y garantizar que la información crítica siempre esté en manos de aquellos que la necesitan.
En términos prácticos, esto se traduce en la posibilidad de crear órdenes de trabajo, buscar información específica de algún equipo y capturar detalles de una actividad en la medida que se realiza la tarea. Por ejemplo, muchas industrias necesitan alguna solución que permita al personal registrar las necesidades de mantenimiento en distintos sectores o en distintas plantas simultáneamente. Esta aplicación permite que los usuarios puedan capturar la información esencial que necesitan desde cada fuente en tiempo real mientras están en continuo desplazamiento, manteniendo en todo momento el control total de su actividad.
A todo ello hay que agregar las continuas y permanentes mejoras imple-mentadas en los dispositivos móviles que han integrado capacidades para la lectura de código de barras o la identidad de los usuarios, facilitando enormemente el ingreso de la información y el control más preciso de los datos, ya que se elimina el tradicional papeleo, que muchas veces generaba más problemas que beneficios.
Casos exitosos
A nivel mundial, y por supuesto en nuestros países, los beneficios que aporta la movilidad y el acceso online a datos críticos referidos al mantenimiento preventivo amenazan con masificar vertiginosamente esta tendencia. Por citar algunos ejemplos, tenemos a la Empresa Nacional de Minería (ENAMI) que decidió informatizar y modernizar la gestión de mantenimiento de activos, avaluados en más de US$100 millones, en la Fundición Paipote (Hernán Videla Lira), ubicada a 8 kilómetros de Copiapó.
Al implementar una solución de arquitectura 100% web, los usuarios podrán disponer de los recursos TI de la compañía en forma remota, a través de un browser estándar de Internet. Esto les permitirá agilizar los procesos asociados, con mejores tiempos de respuesta y rápido acceso a la información corporativa para la toma de decisiones.
Del mismo modo, tenemos a la planta de fabricación de sistemas de audio y video Sony Technology Center de Pittsburg, que eligió cambiar su sistema de administración de compras a una interface web, con el objetivo de optimizar la gestión de los activos, disminuir los niveles de inventario y hacer más eficiente los procesos de compra.
Como conclusión, los beneficios concretos que esta tecnología ofrece se traducen en un intercambio de información más eficiente que mejora el flujo de trabajo y aumenta la productividad, una recolección de datos más precisa y en tiempo real, una mejora considerable de las búsquedas del sistema y del análisis de rendimiento de los activos, así como mejores datos como consecuencia de una mejor carga de los mismos. Todo esto contribuye a que las empresas aumenten su valor y retorno de la inversión.
Abril de 2003
