En momentos en que el desempleo juvenil más que duplica a la actual tasa de cesantía promedio, quienes egresan de los institutos profesionales del país suelen tener un trabajo asegurado, y con buenos niveles de sueldo. Este hecho se maximiza cuando el estudiante elige una carrera tecnológica, según ha comprobado el instituto profesional CIISA, único en Chile focalizado en ofrecer carreras pertenecientes al área de las TI.
“A lo largo de los años hemos observado que nuestros egresados salen del instituto trabajando y que rápidamente llegan a percibir ingresos muy competitivos, que pueden partir de los $ 400.000 líquidos mensuales y llegar hasta $ 1 millón. Por esto, quienes hoy buscar definir su futuro debiesen considerar a las carreras técnico-profesionales como una excelente alternativa”, señala la Vicerrectora Académica de CIISA, Tatiana Salgado.
Parte de la ventaja de las carreras que imparte CIISA radica en que responden a las verdaderas demandas de un mercado laboral deficitario en expertos del área tecnológica. Según estimaciones independientes, en este sector hacen falta a lo menos otros 10 mil profesionales, lo que lleva a que los empleadores estén dispuestos a pagar buenos sueldos a quienes hayan estudiado carreras asociadas al rubro e incluso se vean obligados a contratar extranjeros por la falta de mano de obra local.
CIISA fue recientemente acreditada por 3 años, lo que permite a sus estudiantes financiar sus carreras con becas y créditos del Estado. Año a año, este instituto de educación superior ha formado exitosos profesionales egresados de las carreras de Ingeniería en Computación e Informática, Ingeniería en Telemática, Programación Computacional y Construcción y Administración de Redes de Comunicación. Sin embargo, tomando en cuenta las tendencias y requerimientos del mercado, en 2013 el instituto reforzó su oferta académica sumando dos carreras técnicas que se encuentran entre las más solicitadas por las empresas: Técnico en Minería y Técnico en Prevención de Riesgos.
Tatiana Salgado explica que la demanda por todas estas carreras muestra fuertes alzas en los últimos años, debido a que por un lado permiten emplearse rápidamente y obtener buenos ingresos, y a que se trata de programas de corta duración y bajos aranceles.
“Quienes en este momento están pensando en qué harán con su vida en el largo plazo debieran considerar que una carrera técnica puede abrirles grandes horizontes. Además, no les cierra la posibilidad de ingresar posteriormente a la universidad y de obtener luego un diplomado o un magíster”, afirma la Vicerrectora Académica de CIISA.
