Con una tasa de piratería de software de un 63%, Chile pierde cerca de US$68 millones anuales al dejar de vender licencias, cifra que aumenta a US$204 millones si sumamos los servicios asociados a este negocio. Para la Asociación Chilena de Distribuidores de Software (ADS) esta situación no sólo es preocupante, ya que genera un importante impacto económico, sino que va en desmedro de la imagen país y del desarrollo e inversión TI.
A nivel regional, ¿qué posición ocupa Chile en relación a este tipo de piratería?
En volumen de negocios, ocupamos el cuarto lugar en pérdidas, antecedidos por Brasil, México y Argentina, países que se ubican del primer al tercer lugar en forma consecutiva. Este es un número bastante alto considerando el tamaño de nuestro mercado, pues Brasil, por ejemplo, aunque sufre mayores pérdidas tiene un índice de piratería menor al nuestro a pesar de ser un mercado bastante más grande. Por otra parte, también se deben considerar los servicios asociados a la venta de licencia de un software, como asesoría, desarrollo, integración, capacitación y soporte, ya que por cada US$1 del precio de éste se generan US$2 adicionales de servicio, y si multiplicamos estas cifras la pérdida resultante es mucho mayor, afectando tanto el ingreso país como la generación de empleos.
¿En qué medida impacta esta cifra a nivel de inversión extranjera e imagen país?
Somos un país globalizado y aquellas naciones con las cuales hemos firmado TLCs están exigiendo una mayor protección a la propiedad intelectual, por lo que a futuro observarán atentamente nuestras acciones en esta materia, que hasta hoy no son muchas. Esto puede ir en desmedro de nuestra imagen y de la inversión en tecnología, ya que no estamos garantizando un escenario seguro, creando desconfianza. Además, la piratería también afecta directamente el avance de la industria nacional de software y la oportunidad de exportar nuestras soluciones informáticas, algo que no estamos haciendo en la proporción que deberíamos.
¿Qué aspectos favorecen que la tasa local de piratería esté en alza?
En primer lugar, aunque parece suficiente, la Ley de Propiedad Intelectual tiene deficiencias prácticas, ya que no hay una señal fuerte que advierta que aquél que copia un producto intangible será castigado, a diferencia de las legislaciones de otros países latinoamericanos. Segundo, aún no existen esfuerzos significativos por educar y las personas generalmente creen que piratear es casi un derecho adquirido. Por último, el fácil acceso a Internet es otro factor que favorece esta situación, reflejando que no sólo basta con terminar con la venta callejera de software, sino que también hay que implementar las medidas necesarias para proteger los contenidos de la Red.
¿En qué grado ha penetrado este delito a nivel empresarial?
Precisamente, un 80% de la tasa actual de piratería corresponde a empresas, porcentaje del cual un 30% representa a corporaciones y el 70% restante a las Pymes, que al ser un motor importante de desarrollo económico plantean una gran problemática a resolver. Como ADS buscamos enfrentar esta situación principalmente a través de la educación, pues es fundamental tomar conciencia de que la piratería no es un problema de precio, sino del valor que le damos a la propiedad intelectual.
Septiembre de 2004
