En un mundo empresarial de constantes cambios, las empresas deben tener como prioridad la adaptabilidad.
Herramientas como Low-Code/No-Code, junto con la inteligencia artificial (IA) y los modelos organizacionales adaptativos, facilitan este camino hacia una mayor flexibilidad y capacidad de respuesta. Desde MITI (Asociación Gremial Mejor Industria TI), Felipe Contreras, Vicepresidente, y Oscar Encina, Presidente del Directorio, comparten cómo estas soluciones están transformando el panorama del desarrollo de software.
El sector de desarrollo de software ha encontrado en las plataformas Low-Code/No-Code (LCNC) soluciones que no sólo democratizan el desarrollo, sino que también redefinen la manera en que las empresas abordan los desafíos tecnológicos.
Low-Code y No-Code como plataforma de innovación

Felipe Contreras resalta el impacto de LCNC en la creación de Pruebas de Concepto (POC) y Productos Mínimos Viables (PMV), herramientas esenciales para el desarrollo ágil. Estas plataformas han logrado:
- Reducir barreras de entrada: Gracias a su facilidad de uso, personas con conocimientos técnicos básicos pueden desarrollar soluciones funcionales.
- Acelerar la validación de ideas: Las empresas pueden probar rápidamente conceptos, minimizando riesgos y costos.
- Integrar tecnologías avanzadas: La incorporación de inteligencia artificial generativa permite automatizar procesos complejos y obtener insights en tiempo real.
- Ampliar el alcance de las soluciones: Una vez validadas, estas plataformas permiten escalar funcionalidades sin depender exclusivamente de grandes equipos técnicos.
El ejecutivo añade que la mirada a futuro de las plataformas LCNC estará estrechamente relacionada con la inteligencia artificial (IA). Por ejemplo, herramientas como ChatGPT permiten crear páginas web simulando empresas, como una de venta de repuestos de autos, con solo dar instrucciones. Asimismo, análisis de datos avanzados ya están siendo realizados con modelos de lenguaje como LLM. Esta evolución promete reconstruir nuestra percepción de Low-Code y No-Code, integrando capacidades cada vez más sofisticadas.
Facilitando la colaboración y el desarrollo ágil

Oscar Encina detalla cómo los clientes de sectores como banca y minería están utilizando estas herramientas para resolver problemas específicos y simplificar procesos complejos. En particular, destaca:
- Prototipos funcionales para colaboración: Los clientes desarrollan MVP utilizando LCNC y luego trabajan con empresas de software para transformar esos prototipos en sistemas robustos y personalizados.
- Automatización eficiente: Herramientas como Power Automate han permitido a las empresas optimizar procesos como aprobaciones y notificaciones. Sin embargo, subraya que para maximizar el éxito, es crucial contar con datos empresariales organizados y listos para su uso. Encina observa que esta dinámica inicial permite a las empresas de software comprender mejor las expectativas de los clientes, facilitando el desarrollo de soluciones finales que realmente aborden sus desafíos.
Low-Code y No-Code como complemento, no sustituto
Aunque las plataformas LCNC han traído grandes beneficios, es importante subrayar que no reemplazan el desarrollo profesionalizado. Contreras y Encina coinciden en que su valor real radica en actuar como un punto de partida, permitiendo iteraciones rápidas y efectivas, pero requiriendo el apoyo de expertos para:
- Diseñar arquitecturas personalizadas: LCNC puede manejar tareas estándar, pero el desarrollo avanzado demanda programación a medida.
- Garantizar escalabilidad y seguridad: Migrar soluciones desarrolladas en estas plataformas a sistemas más robustos suele ser complejo sin la planificación adecuada.
- Cumplir normativas estrictas: Algunas industrias requieren cumplimiento de estándares específicos como GDPR o HIPAA, algo que no todas las herramientas LCNC pueden garantizar.
Encina lo compara con construir una casa: “LCNC te da las herramientas para levantar la estructura básica, pero si buscas un diseño único o algo que soporte el paso del tiempo, necesitarás arquitectos y constructores expertos”.
Un ecosistema transformado
Desde MITI, reconocemos que LCNC está cambiando las reglas del juego para el desarrollo de software. Su capacidad para permitir iteraciones rápidas y accesibles ha abierto puertas tanto a empresas emergentes como a grandes corporaciones, democratizando el acceso a soluciones tecnológicas avanzadas. Sin embargo, advertimos que estas plataformas deben utilizarse estratégicamente, como un complemento al desarrollo tradicional, no como un reemplazo.
Con el acompañamiento adecuado, LCNC se convierte en un acelerador del cambio y en un puente entre ideas iniciales y soluciones completas. En esta convergencia entre accesibilidad y profesionalización, vemos el futuro del desarrollo de software: un entorno donde la innovación fluye con rapidez y los expertos aseguran que cada proyecto alcance su máximo potencial.
¡Low-Code y No-Code no son solo herramientas; son catalizadores de una nueva era en la tecnología empresarial!