Alex Poloni M., quien lidera el área Quality Assurance de GST, explica que esta compañía se especializa en brindar servicios que apuntan a resolver problemas en el ámbito de desarrollo de software, realizando pruebas de testing con métodos que aseguran validar los requerimientos proporcionados para la construcción de un programa computacional. ¿El objetivo de las pruebas? Mitigar el impacto de errores imprevistos que pudieran afectar el normal funcionamiento de los sistemas informáticos de una empresa, a fin de asegurar que se cumplen las normas, estándares y procedimientos de alguna organización.
Los servicios de QA de GST, que ya son utilizados por compañías como Isban (Grupo Santander) y Banco Falabella, entre otras, se agrupan en: QA Testing, QA Funcional y QA Técnico. Según detalla el ejecutivo, “en la primera área, nuestra propuesta implica verificar la consistencia entre lo construido, el prototipo y el diseño de software, a través de un diagnóstico exploratorio del comportamiento en los diferentes módulos de un sistema computacional”. En el proceso de testing, se van detectando incidencias y se notifican a fin de que se efectúen las nivelaciones respectivas por parte del diseñador o del constructor. “Cuando esto se corrige, volvemos a verificar hasta conseguir que el cien por ciento del software esté en condiciones para pasar a las pruebas de usuario y luego a su fase de producción”, asevera, agregando que en el caso de que una pieza no cumpla con las especificaciones es rechazada, evitando con esto que se ponga en producción un componente con fallas.
Este servicio involucra el diseño de pruebas funcionales, integrales y, por último, un documento de certificación que registra un testimonio gráfico que respalda éstas, en el cual se refleja el ciclo completo de las pruebas exitosas, más un indicador de calidad del producto.
Servicio multiplataforma
El servicio QA que brinda GST permite desarrollar pruebas funcionales, que se pueden ejecutar en diversas plataformas computacionales, lo que posibilita certificar que los requerimientos del usuario sean satisfechos con el programa construido. Para esto se efectúa un análisis de requerimiento comparado con los resultados obtenidos (ciclos de prueba), inspección de código y testeo de las piezas de software. Esto se puede aplicar tanto para programas desarrollados al interior de la empresa como para los solicitados a una compañía externa; y el análisis y pruebas se realizan de acuerdo a la metodología CMMI, un estándar en la industria de software.
“Si se detectan incidencias, se dan las indicaciones necesarias para que se replique el error, el cual deberá ser resuelto dentro de los plazos definidos y, una vez finalizadas las pruebas funcionales, GST entrega un documento de certificación, en el cual figuran respaldos gráficos de éstas y un resumen con las salvedades que se tuvieron en cuenta durante su realización”, explica.
Finalmente, el área de QA no funcional se orienta a mantener operativas las distintas actividades, por medio de servicios de gestión de ambientes (desarrollo y pruebas de producción); gestión de pruebas; gestión de capacitaciones, promociones de peticiones y paquetización de componentes; documentación y control de éstos; monitoreo (front-end y back-end), ejecución de cambios a producción, ambientación aplicativos, plataformas medias y host, certificaciones en laboratorio de pruebas; y administración de configuraciones.
Todas estas alternativas conforman un completo servicio que, destaca el ejecutivo, apunta a bajar la tasa de incidencias en la fase de producción de los software, evitando el impacto negativo que esto pudiera generar para la empresa, “para lo cual tenemos la flexibilidad de conformar equipos de trabajo con profesionales especialistas y de realizar las pruebas en instalaciones propias o del cliente”, concluye el ejecutivo.