Federico Nan
Durante estos últimos años empresas como Google y Apple nos entregaron una nueva manera de ver y pensar la tecnología, con la pasión por la innovación y tecnología como factor común. Estas empresas inyectaron nuevas metodologías de trabajo y tiempos de producción. Hoy no solo el producto tiene que ser de excelencia, sino que también tiene estar productivo rápido o, como dicen en Google, “speed, speed, speed”.
Los métodos de programación ágil, scrum o programación extrema han sido adoptados por los desarrolladores hace tiempo ya. Pero con estos métodos, junto a la nueva velocidad requerida por el mercado, donde lo más importante es mostrar nuevas funcionalidades y acelerar los ciclos de testing-producción, un nuevo paradigma (re)aparece. ¿Cómo hacer para acompañar desde la infraestructura esta velocidad? ¿Cómo acomodarse a los cambios en versiones, código, funciones sin perder esa velocidad tan buscada? ¿Cómo obtener datos que ayuden a entender qué pasa con mi ecosistema IaaS, SaaS, etc? Las respuestas a estas preguntas se concentran en una sola palabra: devops.
¿En qué consiste este concepto?
Este nuevo término que comenzó hace unos años, hoy está pisando fuerte en el mundo de la tecnología. La palabra devops es el resultado de la unión entre los términos “developers” y “operations”, pero no se limita a comprenderse como una unión de dos tipos de perfiles de profesionales. Devops va más allá de una simple unión: es una nueva cultura de trabajo, colaborativa, comunicativa, basada en la innovación de las herramientas y procesos. Es una nueva cultura de trabajo que, a diferencia de la mayoría, no está forjada desde el directorio o desde políticas de recursos humanos, devops es la respuesta de los integrantes del mundo TI para las empresas, son años de experiencia acumulados, de entender las problemáticas desde dentro. Es un conjunto de herramientas y tecnologías conocidas puestas a trabajar bajo una estructura diferente donde la comunicación y la cooperación son los pilares más fuertes en los que se basa esta cultura.
Qué es y qué no es devops
Como ejemplo volvamos a Google, su lema “speed, speed, speed” y miles y miles de servidores, desarrolladores y productos. ¿Cómo se logra esa velocidad de deploy y al mismo tiempo escalabilidad distribuida? También traslademos preguntas del mundo Google al ámbito corporativo local: ¿cómo enfrentar cambios de proveedores de servicios IaaS o sistemas operativos, actualizaciones en producción, cambios en el código “core”? Un solo término para muchas respuestas: devops.
Veamos un poco más en detalle:
• Devops es un desarrollador o arquitecto de software comprometido con la información de la plataforma y en constante comunicación con el departamento de infraestructura.
• Devops es un departamento de infraestructura con skills de programación, que pueda llevar los conceptos de “ágil” y “extremo” al deploy de servidores y servicios.
• Devops es utilizar las herramientas adecuadas para lograr comunicación, transparencia y velocidad.
• Devops es utilizar herramientas de métricas que permitan comprender el ciclo de vida de una aplicación y su ecosistema.
• Devops es poder crecer y escalar en minutos, basándose en la información obtenida y la comunicación.
• Devops es una cultura que está forjando nuevas herramientas que son un espejo que refleja la cultura que las crea.
• Devops no es una herramienta.
• Devops no es un software.
• Devops no es un nuevo departamento como el de infraestructura o seguridad de la información.
Hoy es el momento de comenzar a utilizar nuevas tecnologías respaldadas por esta cultura de trabajo llamada devops. Jason Jennings tiene una frase que resume todo y al mismo tiempo nos pone en acción: “It’s Not the Big That Eat the Small… It’s the Fast That Eat the Slow”.
