Penetrar fuertemente los mercados chileno y norteamericano es el objetivo que se ha trazado la alianza internacional de negocios que, desde fines del 2004, América XXI mantiene con la empresa argentina de ingeniería de software Vates. Ello, a través de un modelo de negocios del tipo Software Factory, que utiliza principalmente las especificaciones y diseños ya definidos por el mismo cliente o por terceros contratados para tal efecto, realizando sólo las etapas de construcción y prueba de las soluciones. Para eso, se basa en la sinergia creada por las potencialidades tecnológicas de las dos firmas y las ventajas comparativas obtenidas a través de economías de escala. Conversamos al respecto con Carlos González, Gerente Comercial de América XXI; y Diego Schmira, Gerente de Integración de Negocios de Vates.
¿Cuál es su actual relación de negocios?
D. Schmira: Siempre hemos buscado una oferta que potencie las capacidades de ambas empresas, que destacan por su prestigio y visión común de calidad de servicios. Seguimos trabajando para abordar fuertemente Chile a través de nuestra Software Factory, que ha pasado a ser una aplicación tipo commodity en el mercado internacional, con un alto nivel de calidad a un precio muy competitivo. Hoy operamos con clientes de gran envergadura, como ChileCompra, donde estamos asesorando en la reingeniería de su sitio web y tenemos otras relaciones ya avanzadas con empresas chilenas de gran tamaño.
¿Qué otros proyectos existen?
C. González: Destacan proyectos realizados durante el 2005 y el año pasado para Dipreca y Sociedad El Tattersall. Estamos apuntando, además, a ampliar nuestro mercado local a través de prospecciones orientadas al Estado y a entidades como Corfo o el Ministerio Público, que constituyen áreas muy interesantes.
¿Cuál es el beneficio de este modelo de operación?
D. Schmira: La ventaja radica en que America XXI es una empresa de alto prestigio con una profunda expertise en el campo de las TI y un amplio dominio del mercado local. A su vez, nosotros aportamos el know how y la experiencia de una firma con 15 años de trayectoria en desarrollo y que cumple con los estándares de calidad CMMI Nivel 4. Por ejemplo, en EEUU tenemos alianzas con dos empresas de gran envergadura, también trabajamos con el Centro Interamericano de Administraciones Tributarias (CIAT), hemos desarrollado parte del software de BI para el Banco Central de Paraguay y, además, estamos a punto de poner en marcha nuestro proyecto con Sony Ericsson en Suecia.
¿Cómo evalúan el 2006?
D. Schmira: El 2006 se caracterizó por la oferta que pudimos reunir de dos factores fundamentales que venían desarrollándose por separado. Por un lado, el trabajo de Software Factory en el mercado local como un commodity y, por otro, la integración del proceso de calidad, entendido como la satisfacción plena de requerimientos y el cumplimiento de presupuestos y tiempos, entre otros. Para este año, la apuesta se concentra en la capacidad de ofrecer nuestros servicios a través del estándar de calidad internacional CMMI Nivel 4 y próximamente Nivel 5. La modalidad de Software Factory y este estándar de calidad no son aptos para cualquier mercado, ya que éste debe ser maduro, por lo cual apuntamos preferentemente a Chile y EEUU.
C. González: Nuestra oferta para el mercado chileno está orientada a la expansión de este negocio, apoyado en las competencias del cuadro de profesionales y las referencias de la importante cartera de clientes de una empresa como Vates, lo que también permite facilitar la penetración en un mercado emergente como el nuestro. Nuestras expectativas para este año apuntan a lograr un importante crecimiento como alianza de negocios, con lo cual conseguiremos consolidar de mejor forma este exitoso joint venture, que nos ha aportado negocios en ambos lados de la cordillera.