Una crisis en su infraestructura tecnológica, que en algún momento puso en riesgo incluso a sus datos críticos, se convirtió en una oportunidad para que la Universidad Alberto Hurtado realizara una profunda transformación que la llevó a robustecer sus sistemas y, al mismo tiempo, a mejorar notablemente la gestión de su área de Tecnología de la Información (TI).
Así lo testimonió Gustavo Aguirre, Director de TIC de la casa de estudios superiores, durante el cuarto desayuno del Club CIO del Centro de Estudios de TI de la Universidad Católica, realizado recientemente en Santiago.
En su charla, “Crisis de infraestructura TIC, un caso de supervivencia”, el ejecutivo detalló como las fallas persistentes en sus sistemas de almacenamiento se convirtieron en una “tormenta perfecta” para realizar una migración exitosa de sus plataformas tecnológicas. Aguirre afirmó que la crisis se dio justo en su ingreso a la U. Alberto Hurtado, por lo que recién llegado a su cargo debió enfrentar un tema de TI urgente en un área que se encontraba, además, acéfala durante algunos meses.
“Los sistemas de almacenamiento estaban empezando a fallar. La solución era tomar todo el storage, cambiar toda la información, corregir el firmware y luego volver a poner la información, pero eso tomaba dos semanas, en las cuales no podríamos dar ningún tipo de servicios”, comentó Aguirre, detallando que la dificultad era mayor puesto que se encontraban en un período crítico de alta demanda para el área de TI, ya que era el cierre de semestre, momento en que se califica a los alumnos, se realiza la evaluación docente y se inscriben ramos.
Ante ello, y con el apoyo de los profesionales de Dell del área de soporte y servicios de Dell se decidió estabilizar la plataforma para corregir los errores y realizar luego la renovación completa de sus sistemas de infraestructura, para lo cual disponían de dos meses.
“La crisis, desde el punto de vista de la infraestructura, nos permitió arribar a una solución mucho más robusta que la que teníamos, ya que es de última generación, pasando además desde un data center monolítico a uno doble, que nos permite contar con una infraestructura de contingencia. En espacio, procesamiento y capacidad de disco hoy tenemos más del doble de lo que teníamos antes”, resumió Aguirre.
En términos más específicos, la solución contempla una infraestructura de alta disponibilidad en un esquema activo-pasivo, con dos data centers con replicación de datos en dos puntos geográficos distintos, que permite recuperaciones en no más de 15 minutos ante fallas críticas y brinda capacidad para soportar crecimientos superiores al 50%, entre otras cualidades.
Al respecto, Luis Monasterio, Gerente Regional de Soluciones Empresariales para Sudamérica de Dell comenta que “Finalmente la Universidad Alberto Hurtado logró estabilizar su plataforma con la ayuda del área de servicios local, sin costo alguno, y permitiendo dimensionar la solución definitiva que se transformó en la renovación tecnológica que la Universidad necesitaba para enfrentar los nuevos procesos de matrícula y el crecimiento proyectado en los próximos 5 años”.
Aguirre destacó que el área de TI pudo capitalizar de la mejor manera su nueva posición dentro de la casa de estudios, ya que el departamento había pasado a depender de la recién creada Prorrectoría. Esto les permitió transformarse en un verdadero partner de cada área dentro de la universidad. “Dejamos de ser solucionadores de problemas. Somos generadores de servicios, nuestros clientes principales son los alumnos, los docentes y la parte administrativa”, concluyó el Director de TIC de la U. Alberto Hurtado.
