La consumerización de las tecnologías ha sido un factor altamente relevante en la expansión del mercado de colaboración, en especial debido a las nuevas generaciones de Millennials que entran al mercado laboral y que exigen contar con las mismas herramientas que usan en su vida diaria. De acuerdo a Francisco Quijano, Google Business Manager de Soluciones Orión, una importante tendencia en la adopción de tecnologías de colaboración es lo que quiere y exige el usuario. “Hay muchas personas jóvenes que quieren tecnologías de acuerdo a lo que viven en su día a día. Vienen desde la universidad trabajando con soluciones colaborativas, por lo que las empresas que no den ese paso a la colaboración, a la revolución digital o al machine learning, tendrán un tremendo desafío por delante”, indica.
Comparte esta visión Fernando Beninati, Especialista de Productos para el Área de Colaboración de Cisco Chile, quien indica que, así como hace algún tiempo las empresas más grandes absorbían a las más chicas, hoy las que son más ágiles terminarán ganando terreno frente a las más lentas. “Las empresas que no innoven, las que no estén yendo hacia el mundo en el cual las herramientas de colaboración permiten ir hacia la digitalización, tenderán a ser mucho más lentas, perderán agilidad y el mismo mercado las irá consumiendo”, expresa.
Francisco Quijano, SOLUCIONES ORIÓN. Fernando Beninati, CISCO. Pablo Iturbe, TIGABYTES. David Olivares, KRAMER ELECTRONICS. Claudio López, REDVOISS. Luis Mourgues, POLYCOM. Juan Luis Santana, AVAYA. Héctor Insua, NEW PEOPLE GROUP. Ricardo Celis, TEAMTECHNOLOGY. Andrés Gallardo, ZBOX. Andrea Cruz, HPE ARUBA.
La consumerización de las tecnologías
En la actualidad, el modelo de consumo es uno completamente distinto al de hace unas décadas. Los arriendos de películas en video o las compras de música en CD han dado paso a un modelo totalmente online. Es por ello que las empresas deben cambiar al mismo ritmo, con innovación y entregando a sus usuarios las herramientas disponibles para cumplir con sus funciones de la manera en que están acostumbrados.
“En cuanto a la colaboración en las empresas, el gran driver ha sido la consumerización de la tecnología, partiendo por el iPhone, WhatsApp, Facebook y todas estas herramientas que uno tiene en la vida cotidiana, pero llegas a la empresa y tienen unas del siglo pasado”, afirma Pablo Iturbe, Gerente General de Tigabytes.
Un ejemplo de la penetración de las nuevas tecnologías lo presenta David Olivares, Country Manager de Kramer Electronics Chile. “En el tema de educación pasa que, dado a que el acceso a la información es cada vez más fácil, los alumnos no van a clases si estas no son interactivas. Si son una típica cátedra, los alumnos se aburren y no van. Hay sistemas que permiten que cualquier alumno con su propio dispositivo pueda participar, colaborar, hacer presentaciones en conjunto y hasta trabajar en el PC de otro”, afirma.
Y lo cierto es que las herramientas están disponibles y cada vez es más sencillo utilizarlas, por lo que su funcionamiento ya no depende tanto de un especialista en temas de comunicaciones, sino que es incluso factible de implementar por parte de programadores web.
“La capacidad de poner interacción en las aplicaciones normales o en las páginas web está hoy en manos del desarrollador web y ya no se requieren expertos en telecomunicaciones para hacer soluciones de videoconferencia, por ejemplo. Ese efecto, sospechamos, será radical pues básicamente saca el tema del diseño de la interacción del experto al programador normal, potenciando una transformación de las aplicaciones”, indica Claudio López, Gerente TI y Desarrollo de RedVoiss.
Colaboración en los procesos de negocios
Para Luis Mourgues, Country Manager de Polycom en Chile, todas las empresas son susceptibles a implementar herramientas colaborativas, aunque su éxito dependerá de la evolución del negocio y de la incorporación de la tecnología a sus procesos.
“No se trata de solamente tener la tecnología, es importante que esté incorporada en el proceso de negocios e, indudablemente, las nuevas generaciones, jóvenes que se sienten cómodos en el mundo virtual, al entrar al mercado laboral usarán las mismas herramientas con las que crecieron. Y si la empresa no se las brinda, perderán todo ese talento”, señala.
El ejecutivo relata un caso de negocios de la industria de seguros en México, que mientras antes trabaja con 6 constructores civiles para el proceso de liquidación de siniestros, a raíz de un fuerte terremoto optó por contratar 60 personas, con conocimientos en construcción a quienes dotó de iPads para tomar imágenes y videos de las construcciones, material que posteriormente era enviado a las oficinas centrales donde los constructores civiles hacían el análisis. “Con ello lograron aumentar exponencialmente el número de visitas diarias y, a su vez, el revenue. Entonces, cuando logras incorporar la tecnología al proceso de negocios, es cuando realmente se ve el cambio”, añade el ejecutivo de Polycom. Comparte esta visión Juan Luis Santana, Territory Account Manager de Avaya en Chile, quien enfatiza que los proveedores de soluciones de colaboración se deben adentrar en lo que está haciendo el cliente. “Ese es nuestro rol, ver cómo la tecnología ayuda en su proceso, creo que ahí está la clave. Y si se preguntan si las empresas están preparadas para esto, claro que sí, pues en términos de costos hay soluciones desde la nube y on premise, pero nuestro desafío está en identificar eso”, agrega.
El factor innovación
Para Héctor Insua, Gerente de Productividad y Colaboración de New People Group, falta innovación en las soluciones de colaboración, pues no se observan muchas diferencias en cuanto a la tecnología que estaba disponible hace un par de décadas. “Yo no veo hacia dónde van las tecnologías de comunicaciones, que están haciendo las marcas puntualmente. No considero que se haya generado un gran cambio: las herramientas son las mismas, la gran diferencia es que ahora está todo en la nube”, comenta.
Y es este mismo factor el que ha posibilitado los avances en las tecnologías de colaboración. Al permitir un acceso a menores costos y una implementación inmediata, las soluciones basadas en la nube han facilitado los desarrollos a la medida.
Por ejemplo, según detalla Ricardo Celis, CEO de TeamTechnology, su empresa apuesta al desarrollo de soluciones embebidas principalmente en telemedicina. Para el ejecutivo, “de esta manera se acerca la videoconferencia. Se ven estas mismas soluciones en celulares, pero la ventaja comparativa debe pasar por ofrecer calidad de servicio con un ancho de banda mínimo”, indica el ejecutivo.
Colaboración segura
Aunque los asistentes al desayuno de Revista Gerencia concuerdan en que colaborar mediante herramientas de uso personal facilita y agiliza las tareas, también están de acuerdo en la necesidad de que la empresa se preocupe de que esta colaboración se realice sobre una plataforma segura y encriptada.
“La gente saca información por todos lados, a través de su Gmail y de su Whats- App personal, una propuesta comercial, una base de datos, etc. El concepto es que sea cual sea la tecnología que se esté utilizando, siempre se deben transmitir buenas prácticas en materias de seguridad”, comenta el profesional de Soluciones Orión.
Así por ejemplo, y de acuerdo a Andrés Gallardo, Gerente General de ZBox, el correo electrónico se ha convertido en la principal herramienta de las empresas, y la necesidad de contar con una solución segura, aprovechando los beneficios de la nube, es lo que se puede capitalizar a través de servicios de correo y colaboración.
La nube
“Con la computación en la nube, que aprovecha la escala para ofrecer funcionalidades que antes eran inalcanzables para la mayoría de las empresas, ahora todos tienen acceso a mejores herramientas a un precio más asequible. Y eso es lo que está acelerando el ciclo de innovación y de adquisición de estas herramientas”, afirma el ejecutivo de Avaya.
Pero hay opiniones diferentes en cuanto a la adopción de soluciones en la nube. Así, mientras una puede apostar por un mundo 100% cloud, también existe una visión de marca que pasa más por la implementación de sistemas de colaboración en un ambiente híbrido.
“La adopción del cloud en Chile no ha sido lo rápido que Microsoft, Google o Amazon quisieran, y eso pasa porque aún no hay grandes empresas que tengan todos sus sistemas productivos en la nube. Probablemente la tendencia va hacia allá y esa curva será más exponencial, pero hoy nuestra visión es un mundo híbrido donde las empresas tendrán parte de sus sistemas en la nube pero seguirán teniendo sistemas on premise”, señala Andrea Cruz, Territory Account Manager de HPE Aruba.
“Todos promovemos las ventajas de cloud y sabemos que son innumerables, pero hay ciertos paradigmas que hay que romper como que todo será más barato. El tema del enlace internacional, al menos en Chile, es carísimo. Hay muchas cosas para poner en la nube, pero hay otras que se deben mantener pues no tiene sentido llevarlas a la nube”, comenta el ejecutivo de Cisco.
En resumen, si bien las tecnologías de colaboración y la nube han democratizado el uso de las herramientas, la amplia oferta de soluciones y de vendors en este mercado llevan a los proveedores a buscar nuevas formas de encantar y retener a sus clientes. En este sentido, y en palabras de Luis Mourgues de Polycom, “hoy la tecnología puede abrumar. Nuestra labor, más que vender un producto es conocer el negocio, cuál es el problema y cómo ayudarlos con nuestra tecnología. Debemos ser consultores y facilitadores de la incorporación de tecnología en los procesos de negocio”.
