Convertirse en una empresa impulsada por datos conlleva grandes ventajas como adquirir, retener y optimizar la experiencia del cliente, una mayor eficiencia operativa y una mejora de la rentabilidad. Todo esto se puede ver potenciado cuando los datos son manejados desde el entorno cloud ya que este provee soluciones y herramientas para almacenar grandes cantidades de datos y procesarlos en todo su ciclo de vida.
Actualmente en el ambiente de los negocios es común escuchar con frecuencia que “los datos son el nuevo petróleo”. Sin embargo, en principio los datos en sí mismos son pura materia prima, para extraerles el valor hay que recopilarlos, limpiarlos, procesarlos y analizarlos para transformar enormes volúmenes de datos (big data) en información y de ahí en conocimiento.
Para 2025 la consultora McKinsey anticipa que la mayoría de los empleados usarán datos para optimizar casi todos los aspectos de su trabajo. También estiman que para esa fecha vastas redes de dispositivos conectados recopilarán y transmitirán datos e información, a menudo en tiempo real.
“Transformarse en una organización impulsada por datos permite: conocer mejor a los clientes y responder a los cambios en sus demandas, personalizar las ofertas comerciales, hacer más eficiente la gestión integral, disponer de capacidades predictivas, acelerar la innovación y tomar mejores decisiones. Bajo este contexto, hoy el entorno de la nube, provee tanto soluciones para almacenar grandes cantidades de datos, como de las herramientas que se necesitan para trabajar en todo su ciclo de vida”, afirmó Eugenia Lasta, VP Servicios Profesionales de BGH Tech Partner.
Las plataformas en la nube tienden a acelerar la transformación digital de las empresas y les ayudan a convertirse en organizaciones impulsadas por datos. Sin embargo, una investigación de New Vantage Partners encontró que lograr un liderazgo basado en datos sigue siendo una aspiración difícil de alcanzar para la mayoría de las empresas. Solo el 40% informó que estaba administrando datos como un activo empresarial y apenas el 27% dijo que había creado una organización basada en datos.
Si bien al impulsarse por datos las empresas consiguen: ventajas para adquirir y retener clientes, conocimientos para optimizar las experiencias del cliente, mayor eficiencia operativa y mejores resultados económicos, hacerlo en el entorno cloud no es tan simple.
Es indispensable crear una estrategia de datos en la nube que facilite la tarea de preparar los datos, analizarlos y presentarlos. Y en esto necesitan adoptar una arquitectura de datos moderna, flexible y escalable en el entorno cloud.
Un informe de la firma Statista indica que en 2022 más del 60% de todos los datos corporativos se almacenan en la nube. Esta participación alcanzó el 30% en 2015 y fue creciendo a medida que las empresas trasladaban cada vez más sus recursos a entornos cloud con la esperanza de mejorar la seguridad, la confiabilidad y la agilidad comercial.
La computación en la nube brinda capacidades modernas de datos y análisis. Facilita un conveniente almacenamiento de datos remoto, por lo que las organizaciones ya no tienen que depender de las soluciones locales. La nube también ayuda a liberar el poder de los datos confiables, oportunos y relevantes para el análisis moderno. Además, fomenta la colaboración e infunde agilidad en los procesos de análisis para responder a las condiciones comerciales que cambian rápidamente.