El Indice de Desarrollo Digital (IDD) que hemos presentado al país es relevante no sólo por su resultado. Lo trascendente para nuestro crecimiento es que, por primera vez, Chile cuenta con un indicador nacional independiente y riguroso, cuya metodología recayó en la consultora IDC, reconocida internacionalmente.
¿Qué esperábamos como ACTI al emprender este proyecto de medir el desempeño tecnológico del país, tarea en la que también participa Movistar e IDC? Evidente que generar discusión. Debate que debe ser pensando en el largo plazo. Si nos quedamos sólo en la instantánea en torno al indicador de un 62,66% de desarrollo digital, no habremos conseguido buena parte de nuestras expectativas.
Las dos premisas que proponemos para la discusión son, por ahora, la importancia de contar en el país con mediciones que nos muestren nuestra realidad y, qué hacer con los resultados que nos den las investigaciones.
Respecto de lo primero, es importante señalar que no se debe atacar al mensajero cuando la información que nos entrega no es halagüeña y que es de perogrullo decir que la realidad depende de los ojos con que se mire. De ahí la importancia de que Chile cuente con más estudios. En eso el IDD será pionero al evaluar al país en su conjunto.
El IDD escruta a Chile a partir de datos provenientes de fuentes públicas y oficiales como el Servicio de Impuestos Internos, el Banco Central, el Instituto Nacional de Estadísticas. Esta mirada es complementada con indicadores que resultan válidos también en los países miembros del OCDE. En síntesis, son 19 aspectos que se miden en las áreas de hogar, empresa y sector público.
La pertinencia de los indicadores, el rigor metodológico, la fiabilidad de las fuentes son tanto o más relevantes que el resultado en sí, y en el caso de este estudio, estas tres variables aprueban con creces la prueba de la excelencia, y aseguran el contar con información útil para la toma de decisiones.
El IDD es para que como país se tomen decisiones. No es para que discutamos si los indicadores son pertinentes o los resultados válidos. Tampoco para buscar responsables. Sí para mirar hacia el futuro.
La base para empezar a trabajar
¿Qué tenemos que hacer como país para que las Tecnologías de Información impulsen a Chile hacia el esperado desarrollo? Los resultados del IDD deben ser utilizados para responder esa interrogante. El IDD sirve para mostrarnos el nivel de adopción de la tecnología en el país, y al ser éste el primer estudio, fija una línea base sobre la cual empezar a trabajar.
El estudio debe llegar a los escritorios de quienes toman decisiones en el país para servir de foco y argumento para la formulación de políticas públicas. A partir de las brechas que nos muestra el índice se deben generar discusiones, revisión de experiencias y procesos de consulta para resolver cómo lograr avanzar. Ese avance se verá reflejado en los próximos estudios que entreguemos.
La sociedad civil se debe apropiar de este índice. Se debe empoderar a partir de saber que es a través de la inversión en desarrollo tecnológico que alcanzaremos más crecimiento. Los gremios, y en eso estamos en ACTI, deben tomar cada uno los antecedentes que les son atingentes y trabajar para mejorar lo que falta, e insistir en lo que ha dado buenos resultados.
La industria tecnológica debe también sacar sus conclusiones. Ver oportunidades de mercado, de innovación e invertir en mejorar la penetración de sus servicios y productos, en satisfacer las necesidades existentes.
Con todo, no puedo estar más satisfecho por el aporte que este primer Indice de Desarrollo Digital significa y por las opciones que con él se nos presentan.