Scott Klososky.
¿Qué caracteriza a las empresas que van en el camino “correcto” hacia la Transformación Digital?
En primer lugar, su liderazgo, es decir, ¿qué tan sofisticados son sus líderes en entender la tecnología y sus actuales tendencias? Además, el hecho de usar la tecnología como un arma competitiva dentro de su mercado; ¿hay algo único que están haciendo con tecnología para ganar en el mercado? En tercer puesto, encontramos una cultura “adaptativa”, porque una empresa puede comprar toda la tecnología, pero si su gente no la usa, nunca será capaz de obtener el valor de esa inversión.
Asimismo, las organizaciones que están bien encaminadas tienen un buen grupo de “tecnólogos”, quienes realmente pueden sustentar el desarrollo de sus herramientas de TI. Otro factor importante es su arquitectura empresarial (la “unión” entre software, hardware, estructuras de datos, etc.), porque si no está bien construida, la compañía termina con un “Frankenstein”, imposible de mantener o incluso de usar. Por último, tienen una buena gobernancia de su tecnología, lo que también es un aspecto muy importante, considerando lo complejo que pueden llegar a ser ahora los sistemas de TI.
En esa línea, ¿cuáles son las debilidades más comunes al hacer una consultoría?
Muchas veces, encontramos que los líderes “del lado del negocio” no saben mucho de tecnología, y siempre creyeron que podían pasarle los problemas de “qué hacer” con TI para el negocio, al CIO o a un vendor, lo que es una debilidad para cualquier organización. En estos días, la ciberseguridad es otra debilidad, definitivamente para las empresas medianas, pues son lo suficientemente grandes para ser un blanco, pero no tanto como para tener un encargado de seguridad TI. De igual modo, la gobernancia de TI es un punto débil para este segmento de compañías.
Ahora, hablando de manera más general, hay una debilidad en el uso de los datos y de Business Intelligence, pues no se invierten los recursos para realmente transformar los datos en un recurso útil. Otro aspecto que presenta debilidades, es el destino de las inversiones en TI; se invierte demasiado en sistemas de “back-office”, pero no suficiente en plataformas que miran hacia el cliente.
¿Qué tipos de empresas están mejor preparados para aprovechar las soluciones de TI?
Por lejos, las empresas medianas tienen la mejor habilidad para usar la tecnología. Son lo suficientemente pequeñas para no ser burocráticas y tomar decisiones rápidamente, pero son lo suficientemente grandes para tener los recursos necesarios para implementarla. En cambio, las compañías de mayor tamaño tienen los recursos, pero son lentas, les toma mucho tiempo innovar y sacar las cosas. De igual modo, las pequeñas empresas, pueden tener grandes ideas, pero no tienen muchos recursos para llevar adelante esos proyectos.
¿Qué retos hay al lograr una integración entre liderazgo y TI?
Cuando hacemos consultoría, nos referimos a esto como un “matrimonio” entre los tecnólogos y los ejecutivos; entonces, la pregunta es: “¿Qué hace falta para tener un matrimonio sano?”. En este sentido, uno de los desafíos que hemos visto es la falta de comunicación entre ambas partes: los ejecutivos no saben cómo comunicar lo que necesitan a los tecnólogos, y estos, a su vez, no les transmiten lo que la tecnología puede hacer por el negocio. Muchas veces los ejecutivos no quieren seguir las reglas que tiene TI; quieren comprar lo que quieran, sin importarles si se integra bien o no con su arquitectura empresarial, y a medida de que la tecnología se vuelve más importante para el negocio; eso genera mayor fricción en la relación.
¿Qué otras situaciones crean fricción entre ambas partes?
En ciertas empresas, los tecnólogos solo se preocupan de mantener los servidores funcionando o de terminar un proyecto, no de cómo la tecnología podría aportar más ganancias al negocio. Y eso genera fricción, porque mientras los ejecutivos se preocupan de aumentar ganancias, conseguir más clientes y lanzar mejores productos, el área TI solo está concentrada en el uptime de las plataformas. Finalmente, y no menos importante, es que en muchísimas compañías hay poca claridad sobre quién es responsable por los distintos recursos, ya sean los sistemas de software o los datos, entre otros. Si los roles no están claros y nadie es responsable de crear valor con ese recurso, esa situación causará problemas entre ambas partes.
¿Qué tendencias marcarán el uso de TI en la empresa?
Inteligencia Artificial, Computación Cognitiva, Internet de las Cosas (IoT)… Ciertamente, en los próximos cinco años veremos más progresos con el tratamiento de los datos, no tanto en la línea de Big Data o Business Intelligence, pero sí mejoraremos con Data Alchemy o con Data Storytelling, es decir, ser mejores usando los datos para ver cosas que antes no podíamos ver. Además, la batalla entre el cibercrimen organizado y las empresas, aumentará y empeorará. Es una tendencia a la que tendremos que prestar atención, tanto a nivel personal como organizacional. Aparte de todas estas tendencias tecnológicas, creo que el cambio generacional tendrá uno de los mayores impactos. En los próximos 20 años, a medida que los antiguos ejecutivos se retiran, serán reemplazados por líderes más jóvenes y mejores en el uso y la comprensión de la tecnología.
¿Qué recomendaría para una exitosa Transformación Digital?
La transformación es sobre la integración de humanos y tecnología. Entonces, las empresas tienen que entender cómo todos los procesos de su organización se están moviendo hacia un ámbito donde lo harán máquinas, software, o una combinación entre humanos y tecnología. En este sentido, lo más importante es que cada empresa debe encontrar su punto correcto, tomar la decisión acertada de cuándo usar humanos y cuándo emplear software o robots.
Además, las empresas deben ser adaptativas. Estamos en un proceso de profundo cambio, y las organizaciones que tienen la voluntad de abrazar el cambio e innovar muy rápidamente, prosperarán. En este tiempo de transformación, esto debería sonar como algo básico, pero no lo es.
Para terminar, destacaría el realmente entender el valor de los datos como un activo. Ni siquiera hemos rasguñado la superficie de entender cómo la información nos permite ver el negocio en formas que no hemos visto antes, y como mencioné, creo que mejoraremos mucho en la recolección de datos y para obtener miradas que nunca antes habíamos logrado. Habrá más herramientas, sitios web, dispositivos… pero detrás de todo eso habrá flujos masivos de data, verdaderos ríos de información que pueden crear grandes cantidades de valor si sabemos cómo aprovecharlos.