Movilidad y conectividad ubicua, en cualquier momento y lugar, son dos conceptos que los usuarios ya han internalizado como parte de sus demandas cotidianas. Una idea que está presente desde su creación en Mesh, tecnología de Motorola que entrega una solución de banda ancha inalámbrica, móvil e IP, para transmisión de voz, datos y video en amplios sectores. Para conocer los detalles de esta tecnología y sus innovadoras aplicaciones, conversamos con Gabriel Contesse, Country Manager Sector de Soluciones para el Comercio, Gobierno e Industria de la firma.
¿De qué modo opera esta tecnología?
Funciona a través de wireless routers que se instalan a 10 o 15 mt de altura del suelo, los cuales permiten iluminar sectores y establecer una malla de comunicación permanente para distintos access points móviles, como vehículos en movimiento acondicionados con puntos de acceso. De esta manera, provee redes flexibles y escalables, teniendo la particularidad de incorporar el mundo de la banda ancha, que hoy está creciendo con gran rapidez, no solamente en los hogares, sino que también en la actividad productiva de las organizaciones.
¿Cómo se concreta la flexibilidad de Mesh?
Esta ofrece conectividad inalámbrica, pero en movimiento, permitiendo llevarla al lugar en que se necesita y conectar tanto usuarios como vehículos.
Mesh reúne dos mundos. El primero es el de las mallas de comunicaciones, que implica la conectividad entre todos los individuos, incluyendo los medios de transporte que forman parte de un grupo de comunicación.
El segundo mundo está englobado bajo el concepto de ad hoc, que dota a los dispositivos de inteligencia, permitiendo que ante condiciones adversas en terreno o no definidas previamente, la malla de comunicaciones se mantenga y, por ende, la conectividad también. Eso es lo que entrega Mesh, posibilitando que los mismos usuarios sirvan como antenas repetidoras. Su arquitectura les permite conectarse a la señal que dé mayor ancho de banda en forma automática, es decir, la red se optimiza en función de la posición relativa que tienen los miembros de la malla.
¿Qué aplicaciones se vislumbran como posibles con esta tecnología?
En lo que respecta a seguridad pública, cuando se produce una emergencia u operativo específico y los usuarios salen de una zona iluminada pero requieren seguir conectados, Mesh permite establecer centros de comando móviles con capacidad de transmisión multimedia.
En el área minera es posible establecer redes de control de gestión de procesos, pudiendo monitorear aspectos como seguridad interna, transporte de carga o transmitir información crítica para hacer más eficiente los procesos.
Otros ejemplos que sobresalen son las salmoneras, donde es posible monitorear a través de una cámara el comportamiento del cardumen en las jaulas y contar con sistemas de medición de la calidad del proceso salmonero más exactos; y en el sector de transporte, se pueden controlar y optimizar rutas de despacho. Asimismo, dado el concepto con que fue generado, el Transantiago también podría ser un usuario de Mesh.
¿Qué tendencia debiera esperarse en la incorporación de Mesh en Chile?
Esta tecnología tiene gran versatilidad de aplicaciones. Con la proliferación de la banda ancha, el desafío es desarrollar diferentes aplicaciones para habilitar procesos productivos que tradicionalmente se han hecho de otra manera, para ahora realizarlos a través de esta solución. Esto va a significar mucha investigación en sectores como el portuario, de seguridad pública, transporte y minero.
El puente para estas aplicaciones ya está y Mesh lo provee, por lo que en la medida en que éstas vayan surgiendo, se incorporará progresivamente esta tecnología.
Octubre de 2005