Una oficina local en cada país donde se comercializan sus memorias es hoy, para MCT, un paso clave en su estrategia global competitiva. Así, más del 80% de sus pedidos de productos tiene entrega inmediata, una cifra que va en directo beneficio de los clientes. En Chile, la firma, que hoy cuenta con una filial, hace cinco años se encontraba ya presente a través de un distribuidor mayorista, con muy buenos resultados. Acerca de sus planes en el país, conversamos con Daniel Lew, Regional Commercial Manager de MCT Latinoamérica para el Cono Sur.
¿Cómo se definen como proveedor?
MCT no es sólo un vendedor de memorias; somos un proveedor de soluciones. Eso nos permite adaptarnos a las distintas necesidades y modalidades en que trabajan nuestros clientes. Normalmente una oficina de proyectos de una corporación debe adquirir de antemano una gran cantidad de memorias para asegurar el stock necesario para toda la fase del proyecto y para congelar el costo de éstas, cuyas fluctuaciones son conocidas. En MCT estamos acostumbrados a embarcarnos en iniciativas complejas, en las cuales durante meses debemos realizar entregas semanales manteniendo el costo de los productos para toda la duración del proyecto.
También podemos arrendar las memorias. Es común que una corporación necesite ampliar la capacidad de algunos computadores debido a un proyecto o capacitación que lo requiere; o de máquinas que sabe que en algunos meses serán reemplazadas. MCT arrienda las ampliaciones de memorias para esos equipos, evitando que se tengan que adquirir.
¿Cómo impacta en el mercado y en los clientes su oficina local?
Cuando se decidió que MCT expandiría sus horizontes en la Región, no hubo dudas de que Chile sería la primera oficina en anexarse a las ya existentes. Este mercado es estratégico para nuestros clientes regionales y nosotros debemos apoyarlos. Además, el país ha demostrado durante la última década un crecimiento sostenido y previsible; la muestra de que en Latinoamérica se puede ser económicamente sustentable.
Antes de inaugurar la oficina, nuestros clientes sabían que MCT les entregaba cualquier memoria que solicitasen en un plazo nunca mayor a los 10 días. Hoy contamos con un stock local, el cual sigue creciendo mes a mes y nos permite entregar en forma inmediata más del 80% de los pedidos, y las piezas que no tenemos en stock en hasta 10 días.
Nuestra oficina en Santiago está integrada por el equipo comercial y el área logística-técnica. En este sentido, nuestra logística es el orgullo de la marca y es, además, de estándar internacional. Esa es la principal ventaja de MCT; es decir, somos cuidadosos en prometer únicamente aquello que podemos cumplir, y nos esmeramos en no defraudar a los clientes. Además, el precio de nuestros productos está entre un 15% y un 40% bajo el resto del mercado.
A nivel local, ¿hay alguna línea de productos que potenciarán?
Iniciamos nuestro trabajo local proveyendo la línea de memoria RAM propietaria. A esto se suman los dos modelos de pendrives de la gama corporativa, y un catálogo de más de 50 variedades de pendrives, de distintas formas y colores, portarretratos digitales, MP3, MP4 y otros artículos que componen la línea “Digital Promotionals”, que estará disponible en agosto.
¿Existe algún mercado al que apuntarán preferentemente?
El foco exclusivo de la marca son los mercados corporativo y gubernamental. Todo MCT está alineado con esta visión; incluso hasta detalles menores como el packaging de nuestros productos están pensados para beneficio de estos segmentos. Hoy somos líderes en los sectores de call center, banca y finanzas, retail, correos, telefonía y comunicaciones, hidrocarburos, alimenticio y otras industrias, e invitamos a las corporaciones en Chile a que conozcan nuestros productos y prueben las memorias en sus equipos; sólo deben escribirnos a chile@mctlat.com
