Con el objetivo de adaptar su trabajo y expertise de más de diez años al Capability Maturity Model Integration, CMMI, uno de los modelos de mejoramiento de la calidad de los procesos de desarrollo, mantenimiento e ingeniería de software más importantes y reconocidos a nivel mundial, la empresa de servicios informáticos para el sector salud, Tisal optó por el apoyo de la consultora internacional y SEI Partner, Procesix.
“Tras diez años de madurez en el desarrollo de software, sentimos que era hora de someter nuestra forma de trabajo a un modelo de desarrollo de procesos reconocido y probado. Optamos por CMMI de la Carnegie Mellon University y por la gran experiencia de Procesix a nivel nacional e internacional, con excelentes resultados”, indicó Rubén Castillo, Gerente General de Tisal.
Experta en soluciones informáticas para clínicas e instituciones de salud, tanto en Santiago, como en otras regiones del país, Tisal comenzó hace dos años su preparación para adaptar CMMI a su organización. “Partimos solos, armando un equipo de trabajo; luego comenzamos a trabajar con Procesix, quienes tienen una metodología de trabajo afianzada y con su experiencia nos involucraron mucho en todo el proceso, por lo cual dentro de los plazos establecidos y sin mayores contratiempos logramos la evaluación oficial reconocida internacionalmente”, explicó el ejecutivo.
Por su parte, Carlos Pérez, Subgerente de Calidad de Tisal, precisó que ha habido un cambio cultural al interior de la compañía que redunda en productos y servicios de mucho mejor calidad y plazos más cortos. “Ya no se concibe hacer las cosas de otra manera y el impacto en el producto final es cada vez más positivo”, aseguró.
Ahora, el objetivo de Tisal es lograr el Nivel 3 del modelo CMMI. “Es un proceso evolutivo y nuestra visión a futuro es llegar al Nivel 5, el más alto. Esto es fundamental para nuestros planes de internacionalización. Ya partimos con una clínica en Lima, Perú, y estamos evaluando el mercado colombiano. Claramente, si las empresas en Chile quieren traspasar las fronteras, sus procesos deben estar certificados, porque ello asegura relaciones de largo plazo y productos de calidad. Es la única forma de competir”, concluyó Castillo.