Rodrigo Alonso.
Tras haber cumplido una trayectoria llena de éxitos que acompañaron su trabajo profesional por 11 años, Rodrigo Alonso abandona la Gerencia General de Microsoft Chile para dedicarse a proyectos personales, marcando en la empresa el comienzo de un nuevo ciclo, donde se buscará alcanzar el desafío que implica materializar una serie de acuerdos obtenidos durante la gestión de este ejecutivo.
En sus cuatro años como Gerente General, logró posicionar a Microsoft Chile como uno de los principales socios del Gobierno en la tarea de modernización del país, contribuyendo a disminuir la brecha digital y concretando importantes acuerdos de trabajo con diversas universidades. Asimismo, desempeñó un rol importantísimo en las firmas de relevantes acuerdos entre la compañía y el Gobierno de Chile, como el convenio entre el Presidente Ricardo Lagos y Bill Gates en Noviembre de 2000, y que se complementó con la firma del acuerdo de cooperación entre Microsoft y el Estado suscrito por Kevin Johnson, Vicepresidente de Ventas Mundiales de Microsoft, y Alvaro Díaz, Subsecretario de Economía.
Adicionalmente, en el 2001 Microsoft Chile fue reconocida como la empresa número uno para trabajar en el país, según un estudio realizado por el instituto estadounidense Great Place to Work y desde entonces se ha mantenido dentro las cinco primeras del ránking, un logro también obtenido durante la gestión de Alonso.
Tras la firma de estos importantes acuerdos la compañía hoy se prepara para implementarlos, especialmente en la profundización del trabajo gubernamental, el mejoramiento de la posición como socio de negocios para empresas y el afianzamiento de los planes para eliminar la brecha digital en Chile. En este contexto, el ejecutivo se mantendrá en su cargo liderando el proceso de transición hacia un nuevo Gerente, que será dado a conocer en las próximas semanas.
Cabe indicar que Rodrigo Alonso se integró a Microsoft Chile en 1993, en el cargo de Gerente de Grandes Cuentas, período en el cual logró ubicar a la subsidiaria de Microsoft con el mayor posicionamiento del programa de licenciamiento en Latinoamérica. En 1995 fue nombrado Gerente de Marketing y Canal, logrando triplicar el canal de ventas durante los dos años que duró su gestión gracias a la implementación de agresivas políticas de marketing. Posteriormente fue ascendido a Gerente de Ventas a Corporaciones en 1997, y a finales de 1998 Rodrigo Alonso fue transferido a Buenos Aires para asumir como Director de Clientes Corporativos. En 2000 asumió como Gerente General en Chile.