ACTI cumplió 21 años apoyando el crecimiento del país y del sector TIC. En este contexto, en mi discurso durante nuestra cena anual remarqué diversas ideas que me permito resumir a continuación.
El 21 de Mayo, el Presidente Ricardo Lagos en su mensaje a la nación destacó una vez más el rol de las Tecnologías de Información y Comunicaciones para acelerar el desarrollo de Chile. Como gremio creemos que las tareas para alcanzar este desafío son:
Primero. Como país, tenemos que entender y asumir el rol que la tecnología tiene en la batalla contra la pobreza, en el aumento de la equidad y en la generación de un nivel cada vez mayor de transparencia en la gestión. Sólo mediante la innovación posibilitada por las tecnologías, Chile podrá acelerar su crecimiento y así erradicar la pobreza y disminuir las desigualdades sociales, evitando el riesgo de la inestabilidad social o, peor aún, distanciarnos de los mercados globales.
Segundo. Tenemos que hacer un esfuerzo público y privado para elevar el volumen de la inversión del país en investigación y desarrollo. Esto significa aumentar los recursos del Estado en los fondos de innovación, sobre todo empresarial y productiva, e incrementar la proporción de inversión privada en el trabajo de investigación y desarrollo.Como industria estamos dispuestos a asumir este desafío, e interesados en trabajar con los otros gremios empresariales en la búsqueda de alianzas que faciliten el camino. Ya estamos colaborando con Corfo en el desarrollo de los instrumentos públicos destinados a este fin. Reconocemos el esfuerzo hecho por todos los actores en la aprobación del Fondo de Innovación Productiva promulgado recientemente por el Presidente de la República, y será tarea del próximo Gobierno implantar los mecanismos adecuados para emplear dichos recursos para el progreso de Chile.
Tercero. Llamamos al Gobierno a incrementar su inversión en TIC a niveles similares a su preponderancia en la economía nacional. Los ejemplos de avances catalizadores y exitosos, como el SII, Dibam, Registro Civil, Chile-Compra y otros, deben proyectarse a los casi 400 servicios públicos. Hoy el fisco y las empresas públicas representan un 8% en las compras TIC y, sin embargo, el Estado alcanza un 20,5% del PIB. Si se duplica esta inversión aún no llega a ser equiparable a su gravitación en la economía nacional.
Cuarto. Debemos acelerar el aumento en la productividad y compe-titividad mediante la tecnologización de las empresas, especialmente de las Pymes. Esta es una obligación país para ayudar a desarrollar una base de emprendimientos fuertes e innovadores, pues el empleo creativo de tecnología es el sustento de la competitividad y la productividad.
ACTI tiene ya una tradición en su aporte a las Pymes a través del agente operador Corfo, la Corporación de Capacitación OTIC y el trabajo de promoción con el Gobierno. La transferencia tecnológica y de valor agregado nos ha acercado a las necesidades de las empresas más pequeñas del país. El desafío es intensificar este proceso, a fin de generar riqueza para Chile con el crecimiento de muchas de estas empresas.
Quinto. Reconocemos la distancia entre las TIC y la gente, por tanto necesitamos entender mejor cómo el usuario común recibe la tecnología. Son las personas los clientes finales de nuestro trabajo y requerimos que éstas sientan la innovación y aporte que hay en la tecnología. ACTI ha efectuado más de 1.300 alfabetizaciones digitales en dos años, con fondos de franquicias para capacitación. Avanzaremos en la disminución de la brecha digital ahora con una visión de apoyo al empren-dimiento, para que esa disposición tenga una orientación proactiva al desarrollo de valor para las personas.
En Chile contamos con diversos éxitos que refuerzan que es posible acelerar nuestro desarrollo mediante la innovación en el uso de tecnologías. Estos deben servirnos de ejemplo para un círculo virtuoso.
Hemos avanzado mucho y nos queda mucho por delante. La tarea no es más fácil ni más difícil que lo ya hecho, sólo es diferente. Los invito a participar activamente en el desarrollo tecnológico de Chile.
Junio de 2005
