Benhel Sarce.
La billetera digital es un contenedor seguro de identidad electrónica, puede almacenar tarjetas de pago, dinero electrónico y otros tipos de documentos como tarjetas de fidelización o documentos de identidad. Al momento de gestionar un pago, permite hacerlo en línea (vía Internet o directamente en las aplicaciones) o como pago sin contacto en las tiendas a través de NFC, códigos QR (Quick Response Code) o BLE (Bluetooth Low Energy).
La tecnología NFC (Near Field Communication), en particular, tiene por objetivo simplificar una serie de acciones del usuario. Dentro de estas ventajas está la portabilidad: dado que esta tecnología se utiliza a través de nuestros teléfonos inteligentes, tenemos la posibilidad de centrar sus aplicaciones en este dispositivo que nos acompaña en cualquier momento y lugar. Si queremos realizar una transacción económica, por ejemplo, solo nos bastará posicionar el teléfono sobre un POS e ingresar la clave. De esta forma, derribamos el mito de que la portabilidad, para este tipo de acciones, solo es posible a través de las tarjetas de crédito y débito. Lógicamente, esta portabilidad nos permite un uso diario, rápido y fácil.
Otra ventaja importante es que en caso de pérdida de nuestro celular este se puede bloquear con facilidad, anulando en forma inmediata toda la posibilidad de uso de las aplicaciones NFC y, naturalmente, de todas las funcionalidades del móvil. Es decir, con una sola acción, tenemos “a salvo” todas aquellas aplicaciones que podrían poner en riesgo nuestros recursos económicos.
En esta misma línea, el uso de la tecnología NFC nos permite realizar nuestras compras solo posicionando nuestro móvil en el respectivo POS, incorporando nuestra propia clave, lo que evita que perdamos de vista nuestro sistema de pago y así minimizar las posibilidades de clonación o transacciones realizadas por otras personas.
Dos acciones claves
Por estas ventajas, en mercados como Estados Unidos y Reino Unido, más de un millón de clientes de Starbucks usan su aplicación móvil para abonar el café. Pero esa cifra representa apenas el 2% de más de 60 millones en ventas que realiza la cadena de cafeterías por semana. Las billeteras digitales tienen gran potencial de crecimiento en los medios de pago electrónicos, pues cuentan con las condiciones tecnológicas para su implementación. Sin embargo, en Chile aún faltan dos acciones clave: abrir el mercado para que ingresen nuevos actores, con el fin de garantizar una oferta más competitiva; y fomentar la integración entre las diferentes redes. El mercado europeo hace mucho tiempo aprendió que es importante tener competencia y distintas alternativas para que -al final- sea el cliente quien decida cuál le brinda el mayor beneficio. Puede que haya diferentes soluciones en los distintos países de la UE, pero todas interactúan entre ellas.
En este punto, cabe destacar que esta tecnología apunta a todo tipo de mercados, pero beneficia más a los retailers, supermercados y grandes comercios, porque el proceso de compra-venta (a mayor escala en estos lugares) se da con mayor rapidez. Esto genera una nueva cultura comercial por parte de los usuarios, lo que obligará al negocio a permanecer siempre actualizado y atento a las nuevas exigencias del consumidor, que siempre estará enfocado en disfrutar esta nueva experiencia de compra.
Otro beneficio es la seguridad que otorga esta tecnología, pues la tendencia es que el uso de moneda física vaya en descenso. Eso hace que la gente no corra los riesgos de tener dinero físico en sus manos, desalentando el hurto y el robo. Por otro lado, los avances de la tecnología en medidas seguridad hacen que el pago a través de un celular sea más seguro que utilizar el “plástico”, ya que es imposible realizar compras con solo tener el teléfono sin que se encuentre presente su propietario.
Proyecciones
Y si hablamos de las proyecciones de esta tecnología, en el caso de Chile, este es un mercado aún incipiente, no obstante hay un gran potencial en el mundo del retail y el market.
Chile está encaminado a transformarse en una industria moderna. Actualmente se discute en el Parlamento una reforma de la normativa legal que promoverá la apertura del mercado, y con esto el ingreso al país de nuevas alternativas tecnológicas y financieras, que impactarán directamente en el ámbito de las soluciones transaccionales.
Otro aspecto fundamental para la consolidación de la billetera digital como medio de pago es la educación de los potenciales usuarios y la construcción de una cultura respecto al uso de la tecnología en las transacciones económicas. En este sentido, debemos asegurarnos de que las personas entiendan cómo es el ciclo de compra, la seguridad y las ventajas que suma.
Pero además deben existir los incentivos correspondientes para el uso de esta tecnología. Porque al incorporar este tipo de tecnología en el ciclo de compra-venta hay una serie de costos que disminuyen. Por ejemplo, al emitir tarjetas de crédito hay un mayor gasto en la generación de plásticos, a eso se suma el costo de quien hace la entrega de la tarjeta y una serie de otros costos de los que no siempre hay conciencia. Al disminuirlos, y al poner en ejecución esta nueva tecnología, permite brindar una serie de ofertas al usuario final. Finalmente, la billetera digital nos dará la posibilidad de andar más livianos, pues no llevaremos más cosas en la cartera o en nuestros bolsillos. Hace más seguro el día a día, ya sea estando de vacaciones, en el trabajo o en los negocios.
