Durante el Verano las personas disfrutan, pero los equipos electrónicos, sea un computador, notebook, tablet o Smartphone, están sufriendo y dañándose, por lo general sin darnos cuenta. Las principales amenazas son:
– La brisa marina: Uno de los peores enemigos de los notebooks, sobre todo para quienes residen cerca de la playa, es la brisa marina, pues corroe su parte interna, en especial la placa madre.
– La arena: Puede provocar daños en el chasis del notebook, alojarse en los puertos USB u otras conexiones y desde allí, alcanzar otros componentes internos, generando daños.
– El calor: El chasis, hecho de plástico y fibra puede ser deformado por el calor intenso. Si deja su dispositivo olvidado una tarde de verano al interior de un vehículo, debe considerar que la vida útil de la batería de dicho dispositivo podría reducirse hasta en un 25%.
“La temperatura al interior del vehículo con sus ventanas cerradas llega fácilmente a 60° en pocos minutos. Dejar el notebook o computador allí, podría hacer que fallen las piezas más sensibles como el disco duro o el lector de DVD, logrando con ello perdida irrecuperable de información”, expresa Oscar Siré, Director del Area informática del Instituto de Ciencias Tecnológicas, CIISA.
Uno de los elementos más importantes de todo dispositivo electrónico son las baterías. Las de celulares y notebooks están diseñadas para operar a una temperatura promedio de 15°; por cada 10° grados extra la vida útil de las baterías se puede ir reduciendo en forma considerable. Además, siempre es recomendable cargar la batería de cualquier dispositivo electrónico a temperatura ambiente (inferior a 30°).
Por otro lado, uno de los errores más comunes entre quienes trabajan con notebooks en la playa es colocarlas sobre sus piernas. “Esto es lo peor que se pueda hacer ya que aumenta su temperatura, gracias al calor que agrega el propio cuerpo de la persona, pudiendo provocar una falla irreparable en el equipo y la consiguiente pérdida de información”, añade el académico.
– Los líquidos: En verano se multiplican los líquidos que consumimos respecto a otras épocas del año. Al caer sobre un equipo electrónico puede atravesar la membrana del teclado y con ello alcanzar componentes internos. “Incluso pudieran quedar algunas gotitas de líquido que con el tiempo genera óxido y con ello, vendrán seguras fallas eléctricas”, añade Oscar Siré.
¿Qué hacer en caso de caída de líquido sobre el notebook? El experto de CIISA recomienda apagar inmediatamente el notebook y sacar la batería; luego, sacar el líquido que queda; y, finalmente, aplicar secador para hacer que el líquido se evapore. El no apagar el notebook podría provocar un corto circuito y generar daños en algunos componentes.
Siré sugiere que si va a salir de vacaciones y no va a utilizar el notebook por un periodo que supere un par de semanas, “es siempre recomendable retirar las baterías del equipo. Pero hay que tener cuidado, ya que las baterías nunca deben ser almacenadas completamente cargadas ni tampoco completamente descargadas. Lo ideal es que deben almacenarse con una carga en promedio de un 40% y almacenarse en un lugar fresco y seco”.
Los expertos recomiendan siempre realizar una completa mantención del equipo en un servicio técnico especializado al retornar de las vacaciones; con ello, se corregirán los posibles daños generados durante las tan anheladas vacaciones.