GOBIERNO, PERSONAS Y TI
¿Solo un asunto de políticas públicas?Por Kennya Estrella, Gerente General de Iconnect.
Ningún otro actor como la ciudadanía es el llamado a velar por que las TI sean el medio que facilite la vida y no la complejice. Por su parte, la empresa privada tiene mucho que aportar, es quien da el sustento para un acceso oportuno a los diferentes públicos a las nuevas tecnologías. El reto no solo está en entregar nuevos servicios, sino que, aun más relevante, es que estos sean de calidad, con un soporte permanente y con respuestas oportunas y satisfactorias.
Uno de los desafíos más vigorosos y movilizadores de las Tecnologías de Información ha sido el de impulsar el desarrollo de plataformas que ensanchen las libertades humanas, especialmente las relacionadas con las libertades de pensamiento, opinión y comercio. Borrar las distancias para que las personas se relacionen sin intermediación, potenciando las posibilidades de recreación e innovación en sus vidas.
Es así como los gobiernos comprendieron que, utilizadas sanamente, las TI fortalecerían sus relaciones con los ciudadanos, permitiéndoles que, en la diversidad de las sociedades contemporáneas, sean un instrumento eficaz de interrelación social. Sin embargo, los mismos gobiernos, al detectar las amenazas que suponen las interacciones de los ciudadanos, activaron mecanismos de control que durante el último tiempo han puesto en entredicho su compromiso con las libertades individuales que proclaman.
¿Nos corresponde ser pasivos en estas encrucijadas? La respuesta es no. Ningún otro actor como la ciudadanía es el llamado a velar por que las TI sean el medio que facilite la vida y no la complejice. Son los ciudadanos los que debaten sobre cuál es la centralidad de las TI en los programas sociales o en el eje de las políticas gubernamentales. Pero no podemos quedarnos aquí. En la medida en que en nuestra convivencia instalamos los valores de libertad, transparencia, responsabilidad y buena fe, podremos exigir como sociedad que dichos principios se expresen de manera legal y con resguardos jurídicos.
Una herramienta vital
El próximo gobierno tiene desafíos importantes en esta materia. Las Tecnologías de Información se transforman en una herramienta vital y a través de ellas se manejarán los principales canales de comunicación. Las nuevas tecnologías facilitan la vida en la medida de que ellas no generen una anarquía comunicacional. Las regulaciones, los puentes que se creen, el fácil y universal acceso, son la base de una sociedad tecnológica que avanza a la modernidad y la interconexión permanente.
Pero no es el único actor relevante. En la empresa privada también tenemos mucho que aportar, somos quienes damos el sustento para un acceso oportuno a los diferentes públicos a estas nuevas tecnologías. El desafío no solo está en entregar nuevos servicios, sino que, aun más relevante, es que estos sean de calidad, con un soporte permanente y con respuestas oportunas y satisfactorias. En un mundo globalizado como el actual, no podemos darnos el gusto como sector industrial de dejar insatisfechos los requerimientos de quienes nos los han confiado; es por ello que la fidelización es hoy una de los principales desafíos de nuestra industria.
En síntesis, nuestras prácticas cotidianas son las que dotan de sustento y fundamento a los nuevos desarrollos tecnológicos que facilitan nuestras libertades; como también a las políticas públicas de los propios gobiernos. Hoy somos los ciudadanos, los motores de esta innovación; asumiendo siempre que lo único constante es el cambio.
