Daniel de la Maza.
¿Cómo se ha visto exigido el sector salud a nivel tecnológico por la pandemia?
Todos los sectores se han visto muy exigidos, han tenido que cambiar su forma de operar, restringir cierto tipo de actividad y -de una u otra maneracrear nuevas formas de trabajo. El área de la salud no ha sido la excepción; muy por el contrario, hemos estado doblemente desafiados, porque además del impacto general somos parte de la solución y hemos debido responder con agilidad para así sanar a la población.
En tecnología esto ha significado re-enfocar casi la totalidad de los recursos hacia el manejo clínico de la pandemia y mantener solo aquellas otras actividades que sean esenciales para operar o muy estratégicas. Esto ha requerido de los equipos de TI mucha flexibilidad, agilidad, alineamiento y estar más conectados que nunca con lo que la operación médica requiere y -a través de ellos- lo que nuestros pacientes necesitan. Ha significado también pensar de forma creativa en cómo aportar desde nuestra gestión de manera efectiva, pragmática y simple, utilizando la tecnología disponible.
¿Se ha acelerado una transformación digital que ya venía en camino?
Sin duda esta pandemia ha sido el mayor acelerador de la transformación digital en años. Para algunos esto se ha dado un poco a la fuerza, pero creo que las organizaciones que habíamos iniciado este proceso nos hemos visto en ventaja, porque ya teníamos una estructura digital sobre la cual trabajar. La primera transformación y más evidente tiene que ver con el teletrabajo y la colaboración no presencial (esto incluye videollamadas), algo que ha probado ser muy efectivo en las áreas de apoyo y administrativas, incluso más que el esquema de trabajo presencial para algunas actividades.
En el ámbito de atención de salud, la llegada del Coronavirus aceleró la implementación de nuestra estrategia de atención por telemedicina que veníamos trabajando hace más de un año. En pocas semanas conformamos una unidad que hoy ya concentra un volumen relevante de atenciones y que permite una conexión entre, por ejemplo, un paciente Fonasa del extremo sur con un médico especialista que atiende en la capital. Esto se traduce en mayor acceso y -en definitiva- mejor salud para los habitantes de Chile. Aquí hay un quiebre que marcará el futuro porque esta nueva forma de atención médica llegó para quedarse.
Aceleramos también nuestra estrategia de Inteligencia Artificial, a través de una alianza entre RedSalud y Google, para desarrollar un estudio de radiografías de tórax para detección de Covid-19, que hoy está en fase de pruebas finales de efectividad. Esta es la primera investigación con un foco 100% adaptado a la realidad chilena, que permite complementar la capacidad de testeo y reducir los tiempos de espera del diagnóstico.
¿Cuáles han sido en este sentido los principales retos para RedSalud?
Uno de los principales retos en materia de transformación digital ha sido adaptarse a este nuevo escenario que no tenía precedentes; poder definir una estrategia de transición, re-priorizar proyectos, re-asignar recursos y comenzar a trabajar de una manera más ágil y flexible en base a esta contingencia, recordando siempre nuestro propósito: brindar salud de calidad accesible, disponible y con calidez.
¿Qué tecnologías han sido claves en este sentido?
Sin duda, las herramientas de colaboración han sido clave, las aplicaciones de seguimiento de proyectos (o gestión de equipos), tareas y todas las tecnologías nuevas que dan flexibilidad y escalabilidad. En particular me refiero a todo el mundo cloud.
¿En qué proyectos están embarcados?
Tenemos una cartera de más de 40 proyectos tecnológicos en distintos ámbitos: proyectos TI estructurales que tienen que ver con la modernización y unificación de nuestros sistemas “core”, proyectos que apuntan a mejorar la experiencia de nuestros pacientes y cuerpo médico; proyectos de menor plazo que buscan una mejora rápida en procesos específicos de la compañía; y proyectos de innovación como los mencionados anteriormente, que apuntan a mover el límite de lo convencional.
¿Cuáles son las claves del rol del CIO en tiempos de pandemia?
Lo primero es mantenerse conectado con lo que está ocurriendo en el negocio y en la operación; la agenda de TI debe dar respuesta a esa realidad. Lo segundo es entregar soluciones suficientemente ágiles y flexibles para poder lidiar con los extraordinarios tiempos que estamos viviendo.
Importante también es ejercer el liderazgo sobre el mismo equipo de tecnología (que sin ellos nada sería posible) para poder alinearlo en esa conexión con las necesidades de la operación -que son una expresión de las necesidades de nuestros pacientes- y así dar respuestas a los cambios que muchas veces debemos ejecutar en el camino. Construir un equipo de alto desempe- ño, flexible y ágil es también un gran desafío, no solo en tiempos de pandemia, sino en general. Afortunadamente hemos podido constituir ese equipo (que incluye también varios partners tecnológicos), lo que ha sido clave en este proceso.
El CIO y su equipo deben convertirse en un “brazo armado” de la organización para enfrentar estos temas y poder modelar e implementar las nuevas tecnologías. Creo que ahora, más que nunca, el rol del CIO se hace clave para poder sortear estos tiempos.
RedSalud CChC es una de las redes de salud privada con mayor cobertura de Chile, cuyo propósito es brindar a sus pacientes una salud de calidad accesible, disponible y con calidez humana.
Actualmente, cuenta con más de 40 centros médicos y dentales a lo largo de todo Chile y 9 clínicas: RedSalud Santiago, RedSalud Vitacura y RedSalud Providencia, además de las clínicas regionales RedSalud Iquique, Elqui, Valparaíso, Rancagua, Mayor Temuco y Magallanes.