Rodrigo Troncoso, Account Manager del Mercado Educación de Epson.
Aún cuando varias universidades y colegios están programando un retorno gradual a las aulas, la mayoría de las autoridades de distintos planteles reconocen que hasta que no exista una vacuna contra el coronavirus, la forma de enseñar ya no será meramente presencial, sino híbrida. Es decir, las nuevas clases serán impartidas en un formato mixto que integra sesiones presenciales y virtuales.
En función de lo anterior, Rodrigo Troncoso, Account Manager del Mercado Educación de Epson, presentó en el marco del “Primer Festival Audiovisual en Educación en Ciencias de la Salud (IFACES) de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, el uso de proyectores interactivos Epson para el nuevo contexto educativo.
Según el ejecutivo, la tecnología de la compañía japonesa permite, por un lado, la colaboración y la participación de quienes están conectados de forma remota y, por otro, la plena captura de contenidos cuando las sesiones se realizan en el aula bajo la nueva normativa de distanciamiento físico.
“Algo determinante para el éxito de las clases remotas es que la dinámica sea lo más ‘vivencial’ posible. En este sentido, los recursos tecnológicos debieran asegurar que la experiencia de aprendizaje sea bidireccional entre el profesor y los alumnos. Con los videoproyectores interactivos Brightlink de Epson es posible visualizar en la pantalla del alumno, las intervenciones, preguntas y ejercicios resueltos por parte del profesor que está conectado desde la sala de clases”, aseguró.
Para lograr esta interacción, los modelos Brightlink 675Wi+ y el Brightlink 695Wi+ de Epson digitalizan el pizarrón por medio del software Easy Interactive Tools. Además, permiten integrar una cámara frontal y micrófono para que los profesores puedan comunicarse de manera aún más eficiente con su audiencia, convirtiéndose no solo en educadores sino en “actores” de la puesta en escena. También compartir presentaciones previamente diseñadas y otros recursos de internet como videos en línea, audio y otras aplicaciones.
Así, durante la sesión transmitida por cualquier plataforma de videoconferencia (zoom, meet, teams u otra), todo alumno o alumna conectada desde casa y con previa autorización del docente a cargo, podrá visualizar algún documento en línea, resolver en tiempo real algún ejercicio entregado en clases y así cumplir con la premisa de una interacción realmente colaborativa.
En el formato de clases presenciales, estos equipos también entregan valor agregado. La opción de proyectar una pantalla de 100 a 120”, garantiza que cualquier estudiante presente en el aula visualice de forma clara los contenidos entregados, aún cuando el espacio cumpla con los actuales protocolos de distanciamiento físico.
“Con la videoproyección es posible que el 93% de los asistentes capture el contenido traspasado por el profesor de manera analítica, incluso si este tiene mucho detalle. Una diferencia sustancial respecto a lo que logra un televisor LED de 70”, donde solo el 58% de la audiencia presencial está en condiciones de absorber con claridad la información expuesta”, concluyó Rodrigo Troncoso.