Por Fernando Martínez Santana, Rector AIEP.
La red se ha transformado en una vía de conexión con posibilidades que no existían antes del Covid-19. El pasado 17 de mayo celebramos el Día Mundial de Internet, fecha que en este 2021 se conmemoró por segunda vez enmarcados en esta nueva realidad que nos plantea la pandemia, donde la red toma cada vez más protagonismo en cómo hacemos las cosas, una transformación digital acelerada y forzada por una crisis sanitaria.
A más de un año de la llegada de la pandemia a nuestro país, hoy vivimos una nueva realidad que ya hemos hecho parte de nuestras vidas. Incluso cuando muchas de estas tecnologías existían antes de la crisis sanitaria, no estaban integradas en nuestro cotidiano, ni tampoco gozaban de la importancia que hoy sí le damos. Ejemplo de ello son las videollamadas o la opción de poder trabajar desde casa. Así, la conectividad se transforma en un factor clave en el desarrollo de la vida y de nuestras obligaciones profesionales, ayudándonos a sobrellevar el encierro de mejor forma.
En el último estudio de la empresa de reclutamiento Robert Half, en la que participaron más de 180 gerentes en Chile, el 70% de ellos declaró que su percepción sobre el teletrabajo cambió positivamente.
La educación no está ajena a esta transformación, con colegios y universidades que, ante la obligación de cerrar sus puertas, debieron seguir funcionando a distancia, comprobaron que la efectividad de los formatos online es concreta y real.
Definitivamente desde nuestra mirada como entidad educacional técnico superior, la pandemia aceleró una tendencia, cambió la pendiente y veremos cómo a futuro las carreras serán cada día más online y digitales haciendo énfasis en el rol que cumple AIEP en la educación online, con una experiencia de más siete años y cerca de 9 mil estudiantes que han escogido este formato de estudios, representando alrededor de un 10% de la matrícula total.
En nuestro caso, a fines del año 2020 tuvimos la primera experiencia de titulación a distancia o telepresencial, en la cual un estudiante de la carrera de Personal Trainer, Paolo Opazo, dio su examen de grado desde su hogar. Ello mediante conexión desde su celular y utilizando su televisor como proyector, todo con apoyo de la institución, resultando en una experiencia exitosa que se ha seguido repitiendo.
Internet es clave en esta nueva realidad. Sin la conectividad que nos entrega, no podríamos mantenernos al día con nuestras familias ni amigos, así como tampoco trabajar desde casa cuidándonos de posibles contagios. Al mismo tiempo, los niños y jóvenes han podido continuar con sus estudios con una herramienta que nos permite estar incluso más cerca de lo que hacíamos antes de la crisis, pero de una manera distinta, con cambios de paradigmas que llegaron para quedarse.