Por Carolina Guzmán Campos, Directora Ejecutiva de AppWorki.
Las paralizaciones y cierre de faenas por incumplimiento de protocolo sanitario están golpeando a diversos sectores, como la construcción y el forestal, tal como ocurrió recientemente con el proyecto de la planta Arauco en el Biobío por deficiencias sanitarias. Lidiar con las válidas exigencias del gremio y el Gobierno, y la vez, con trabajadores fatigados es un gran desafío que hoy enfrenta también la minería y la energía.
Y es que, aunque muchos están promoviendo innovadores beneficios de trabajo remoto, con semanas libres o viernes sin Zoom como implementó Citigroup, este tipo de industrias productivas al menos en gran parte de sus procesos, aún no puede darse ese lujo, porque los trabajadores deben estar con las manos y pies en terreno.
Para seguir operando entonces, desafiando la adversidad física y psicológica, es clave el uso de herramientas digitales que apoyen en el autocuidado y presten contención a los trabajadores en el momento oportuno.
Asimismo, herramientas de control de medidas sanitarias que faciliten la tarea de monitorear y chequear cumplimiento de protocolos sanitarios, activar alertas tempranas de posibles casos sospechosos, u otras como Pasaporte de Ingreso, que aporten en la trazabilidad en línea de Covid-19, con registro digital del ingreso a los espacios físicos tanto de trabajadores, como de proveedores o visitantes.
También sería útil disponibilizar soportes para que tanto los mineros, técnicos, ingenieros y todo el personal puedan informar oportunamente los problemas que detectan en los centros de trabajo, con posibilidad de subir fotografías, para advertir la gravedad de los hallazgos en línea.
Esa rapidez y facilidad de disponer de los datos a tiempo es el mayor desafío, y ya existen las herramientas para lograrlo. Es deber de quienes toman las decisiones ponerlas a disposición de sus equipos.
Porque lo cierto es que hay muchas áreas por abordar y los mandos internos no dan abasto para enfrentar esos distintos frentes con las herramientas tradicionales. Se necesita incorporar la tecnología en todos estos procesos, para aliviarles la tarea a ellos, a los contratistas y sus proveedores.
No es momento de quedarse atrapado en las antiguas formas de trabajar, sino de dar el salto, y gestionar el riesgo, transformándolo en una oportunidad para enfrentar de frente todos los problemas que están afectando a estas industrias con rapidez, en línea e incorporando a todos los trabajadores, porque también son ellos quienes pueden aportar y ser protagonistas en esta tarea.
Las empresas no sólo deben cumplir con responsabilidad el compromiso sostenido con su sector, sino también comprobar y tener registro de las acciones que realizan para mantener a raya el Covid-19 en sus espacios físicos. Si bien la mayoría ha realizado esfuerzos en cambiar sus dinámicas laborales, para cumplir con todos los protocolos establecidos por la autoridad, existe el riesgo de cierre, si no se cuenta con el respaldo para demostrar el cumplimiento de los acuerdos en las distintas especialidades de la cadena de valor que aseguran la continuidad.
Por ello, reiteramos el llamado a las industrias productivas del país, especialmente en la minería y energía, a ponerse al día con el uso de las nuevas tecnologías que respalden el esfuerzo que están realizando en esta pandemia, y lograr los cumplimientos contractuales, tan importantes para la reactivación del país.
