COEFICIENTE DIGITAL: Clave para la competitividad de las empresas

Publicado el 31 May 2014

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COEFICIENTE DIGITAL
Clave para la competitividad de las empresas

Latinoamérica es una de las regiones con peor coeficiente digital en el panorama mundial. Así lo reveló la Encuesta Anual Digital IQ que realiza PWC, que exhibe también una preocupación creciente de las empresas por cómo afrontar los cambios tecnológicos, entre otras tendencias.

César Calleja, PWCDesde hace seis años, la consultora PWC realiza una encuesta anual sobre coeficiente digital en las compañías a nivel mundial (Encuesta Anual Digital IQ), estudio que busca conocer las principales tendencias en materia de tecnología y cómo las empresas la entienden e integran en sus negocios. Este año los resultados revelaron interesantes cambios que serán claves en la evolución de las empresas y que lamentablemente dejaron a Latinoamérica como una de las regiones con peor coeficiente en el panorama mundial.

Y aunque nunca ha dejado de estar vigente, Digital IQ está tomando más fuerza, lo que ha llevado a incluir por primera vez a Hispanoamérica en el estudio realizado con cerca de 1.500 ejecutivos de todo el mundo, de los cuales un 50% es responsable de sistemas y el restante 50% es responsable de áreas funcionales dentro de las empresas, lo que ha permitido una visión de 360 grados de cómo es vista y aprovechada la tecnología.

El valor de la tecnología “in crescendo”

César Calleja, Líder de Consultoría en Tecnología de PWC, quien presentó los principales resultados de la sexta versión de la encuesta, explica que “el coeficiente digital es básicamente cómo una empresa está aprovechando el valor que le brinda la tecnología en su estrategia de negocios”. Su importancia creciente es uno de los principales cambios detectados: la tecnología tiene cada vez más valor al interior de las compañías, lo que se refleja, por ejemplo, en los niveles de inversión que se esperan para este 2014.

Como afirma el ejecutivo, “a pesar de la crisis que siguen viviendo muchas regiones, este año se estima que la inversión en tecnología en el mundo crecerá en un 3,1%, lo que traducido en cifras significa US$8 billones, o sea, el 5% del Producto Interno Bruto de todos los países y es reflejo del peso que tiene la tecnología en la economía”.

Las mega tendencias

El estudio reveló, como señala César Calleja, cinco grandes tendencias que están cambiando el mundo y que determinarán el escenario donde se moverán las empresas. La primera de ellas es una modificación en los poderes económicos tradicionales, que ahora no solo incorporan economías como la de China, también Latinoamérica está siendo vista como una potencia.

En segundo lugar, los flujos migratorios desde las zonas rurales a las ciudades, que están dando lugar a temas como las Smart City (ciudades inteligentes) y a nuevas necesidades y desafíos para los centros urbanos. Junto a ello, como tercera tendencia se observa el cambio en la estructura de la pirámide demográfica que ve un crecimiento de las clases medias, lo que significa que habrá un nuevo comprador al que tanto los gobiernos como las compañías deberán dar respuestas. Existe también una escasez de recursos naturales que obliga a buscar nuevas soluciones, lo que constituye la cuarta tendencia, y, finalmente, en quinto lugar, figura la preocupación por cómo afrontar los cambios tecnológicos siempre más veloces.

Según la información entregada por los CEOs de las compañías, al preguntarles cuáles de esas macro tendencias les preocupaban desde el punto de vista de sus negocios, el 81% se inclinó por los cambios tecnológicos. “Eso es una respuesta absolutamente nueva. A la pregunta: ¿Cuál será la ‘next big thing’ que impactará su negocio, la respuesta mayoritaria fue el uso de la tecnología porque ella cambiará el modelo de negocios”, afirma el ejecutivo de PWC.

Frente a los cambios demográficos que traerán consigo un nuevo tipo de clientes, César Calleja agrega que “en 2020, el 61% de los clientes en el Reino Unido será nativo digital, es decir, personas que han nacido con un dispositivo digital en las manos frente al 13% actual”, lo que implica un nuevo perfil de consumidor, más exigente e informado.

Una contradicción evidenciada por el estudio es que, a pesar de la reconocida importancia de la tecnología, al consultar a los responsables sobre las inversiones que se realizarán, esta ocupa solo el tercer lugar en el ranking y lo que más les preocupa es el crecimiento, que será el reto futuro de las compañías.

Alcanzar un buen Digital IQ

En este marco de cambios y desafíos, el estudio concluyó que existen cinco características que debe tener una empresa para alcanzar un buen coeficiente digital (Digital IQ), ya que “hay una correspondencia directa entre este y su performance en términos de competitividad: las compañías que tienen un buen coeficiente digital, tienen 2,2 más probabilidades de triunfar en su sector”, comenta el ejecutivo.

Las cinco características mencionadas son:

1. El CEO de la compañía debe ser un sponsor de todo lo relacionado con el mundo digital, debe ser un abanderado del uso de la tecnología. En aquellas firmas que tienen un buen IQ, el CEO es quien impulsa la transformación digital y el uso de la tecnología en el 81% de los casos, frente a una media del 68%. Latinoamérica es la Región peor parada con solo un 47%.

2. Existe una fuerte relación entre el área de marketing y el área de TI y este es uno de los datos que sorprendió en la encuesta. En la transformación digital, el encargado de marketing se convierte en una figura que está en el “ojo del huracán” y el área de sistemas también porque tiene que ser la que canalice el cambio dentro de la empresa. El rol del CIO también cambia y se debe convertir en un asesor estratégico.

3. La tercera característica es la innovación, y dentro de ella hay una herramienta que puede ayudar a crecer y es el enfoque “outside”, es decir, utilizar fuentes externas en esos procesos. Las empresas con mejor Digital IQ tienen un proceso formal de innovación en marcha.

4. Inversiones en arquitecturas tecnológicas donde fueron detectadas cinco grandes áreas: la explotación de los datos y analytics, que es la más importante, y cuando se habla de data mining no se trata solo de sacar un informe, el gran cambio es pasar de los datos a acciones de negocio y que con analytics sea posible inferir determinados comportamientos de la empresa. Una segunda tecnología es cloud, aunque aún existe cierto temor por la nube pública que se está superando gracias a la consumerización, es decir, llevar las aplicaciones que se utilizan privadamente a las empresas. Otra área es la movilidad con Bring Your Own Devices o el hecho de que los trabajadores puedan utilizar sus dispositivos conectados a la compañía para trabajar. La ciberseguridad, que hasta hace un tiempo era un tema relegado a áreas específicas, hoy también se convierte en una preocupación para los dirigentes y, finalmente, los temas relacionados con social media o el uso de las redes sociales.

5. Necesidad de nuevos “skills” o capacidades para afrontar los retos digitales de las empresas. Hay una serie de talentos y capacidades que deben surgir, y lo importante es que se defina un “framework” de las habilidades necesarias dentro de la empresa.

La realidad de Latinoamérica

La situación de nuestro continente no es de las mejores: solo el 36% de las compañías tiene un buen Digital IQ, cifra extremadamente baja comparada con la media mundial que es de un 63% y una de las razones puede ser que los CEOs no están apoyando los temas digitales, además de una falta de sensibilización al interior de las empresas.

En nuestra Región, solo un 48% está preocupado por la tecnología comparado con la media de un 69% y solamente en el 18% de los casos los temas digitales están reflejados en la estrategia de la empresa, frente a un 47% a nivel global.

Sin duda, estas cifras reflejan la enorme tarea que enfrentan las firmas de la Región para alcanzar un buen coeficiente digital que les permita enfrentar los desafíos futuros y ser parte de un mercado en constante evolución.

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Redacción

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