En el cierre del ciclo dedicado al 5G de “Visión de Líderes” de Itaú, Josefina Hernández, Directora Legal y de Asuntos Públicos de American Tower (ATC), conversó acerca de las nuevas oportunidades que se abren con esta tecnología, la infraestructura necesaria para desarrollarla y su estado actual en América Latina.
Al comenzar el encuentro, Hernández se refirió a la brecha digital, entregando una breve definición: “la entendemos como las desigualdades respecto al acceso de Internet y a la calidad del mismo. Aquellos que se encuentran lejos de las zonas más urbanas, en áreas rurales o con menos densidad demográfica, como el norte o el sur de Chile, cuentan con menos presencia de operadores. Hoy la conexión a Internet nos da acceso a empleos de calidad, a telemedicina, a educación remota, etc. Esa es la importancia de acceder a un Internet de buena calidad”.
Para reducir estas diferencias, la ejecutiva de ATC señaló que “es importante que todo el ecosistema de las telecomunicaciones entienda que depende de todos: no hay un solo enemigo, responsable o culpable de que exista esta brecha. Es necesaria una conciencia de todos los actores, porque cuando uno se pregunta cómo reducir esa diferencia, la respuesta es brindando más y mejor señal, lo que va a dar más y mejores oportunidades. Eso se resuelve con una articulación entre el sector privado y el sector público”.
En términos de la población en Chile que está conectada, Hernández puntualizó que hay que diferenciar los parámetros entre los que están conectados y los que están ‘bien’ conectados: “Aproximadamente, hay un 50% de la población bien conectada, y dentro de la mitad restante un 70% está conectada, pero con un cuestionamiento muy grande sobre la calidad de conexión, que no necesariamente les permite acceder a educación, salud y otros beneficios”.
Respecto a otros países de América Latina, según la experta de ATC, “Chile tiene una regulación de las más complejas. Es necesario simplificar y agilizar los procesos, poniendo a disposición de los funcionarios públicos todas las herramientas necesarias. La gran diferencia está en Colombia y Perú, donde las autoridades tienen un compromiso con la necesidad de desplegar el 5G”.
En cuanto al acceso a Internet como un derecho, Hernández dijo que “Chile va en ese camino, de reconocerlo como un derecho básico. Ese es el comienzo, pero aún falta que todos los actores garanticen este acceso”.
Al hablar sobre los beneficios que traerá esta tecnología, la ejecutiva de ATC explicó que “ciudad, seguridad, salud, transporte y educación son los cinco ejes que pueden revolucionarse con el 5G. El gran foco de crecimiento del 5G está dado, por ejemplo, en servicios para el peatón. Cuando uno ve los mapas de ciudades inteligentes, encuentra sendas peatonales iluminadas con colores y con sonidos para los hipoacúsicos, reduciendo los accidentes de tránsito”.