En un mundo sumamente globalizado, día a día se hace más imperioso combinar las habilidades del capital humano con las soluciones que entrega la tecnología de avanzada. En este marco, el modelo de universidades corporativas juega un rol preponderante a la hora de gestionar la capacitación y el desarrollo de las personas en la organización y alinear sus potencialidades con los requerimientos del negocio. Para conocer más al respecto, conversamos con Hernán Moreno, Gerente Comercial de Capacitación de la Universidad Tecnológica de Chile Inacap; y con José Angel Fernández, Director de la Universidad Corporativa Unión Fenosa de España, quien visitó nuestro país para participar en el segundo ciclo de Aprendizaje Corporativo y Competitividad Empresarial”, organizado por la Universidad Tecnológica de Chile Inacap.
¿Cómo contribuye esta modalidad al desarrollo de las empresas?
J. A. Fernández: Las universidades corporativas ayudan principalmente a cohesionar las diferentes divisiones de la organización. Se trata de realizar una capacitación del personal con un enfoque estratégico que permita a los empleados ayudar a cumplir los objetivos del negocio, sin necesariamente centrar el foco en subsanar los errores que cometen las personas o mejorar los déficit de calificación, sino más bien orientado a explotar todo el potencial del capital humano. Es una apuesta a largo plazo por el crecimiento de la empresa, no una forma de obtener resultados inmediatos.
¿Cuál es la experiencia que ha tenido la Universidad Corporativa Unión Fenosa?
J. A. Fernández: Hace más de 25 años en Unión Fenosa apostamos a desarrollar nuestros propios sistemas informáticos de gestión, en lugar de depender única y exclusivamente de herramientas estándares. De esa manera, formamos equipos que abordan proyectos; analizan las necesidades que debe cubrir la empresa; y finalmente crean diseños funcionales con el fin de implantar sus propias soluciones tecnológicas. En otras palabras, tenemos herramientas propias, y en el mundo de los negocios eso es un elemento esencial.
¿Qué rol cumple Inacap en aplicar esta visión en Chile?
H. Moreno: Dada la apertura comercial que posee actualmente nuestra economía -con altos niveles de competitividad y ocupando la primera posición en índices internacionales que miden variables macroeconómicas-, nuestra institución está llamada a convertirse en un aliado estratégico que les permita a las firmas implementar este modelo de gestión de capacitación y desarrollo humano. Si bien las grandes empresas cuentan con unidades propias de capacitación, requieren de un aliado que les dé la posibilidad de tener metodologías avanzadas y diferentes mecanismos de acción, y ese aliado somos nosotros: la Universidad Tecnológica de Chile, Inacap.
¿En qué medida las empresas chilenas están utilizando esta modalidad?
H. Moreno: Si bien es cierto que algunas empresas líderes de nuestro país están implementado el modelo, tales como Finning, Lan Chile y D&S, la mayoría de las organizaciones no ha logrado comprender los beneficios que les puede otorgar una universidad corporativa.
J. A. Fernández: En cuanto a la realidad chilena, no tengo muchos antecedentes de que las compañías tengan incorporado el concepto en su quehacer organizacional, pero lo cierto es que a través del seminario “Aprendizaje Corporativo y Competitividad Empresarial”, organizado por Inacap, he podido conocer de cerca la existencia de importantes empresas nacionales que utilizan la modalidad y que saben fehacientemente qué aporte les puede entregar para sustentar el desarrollo de sus negocios, y tengo la certeza de que Chile debe sacar provecho de este modelo para convertirse en uno de los países más avanzados de Iberoamérica en esta materia.
