La llegada de nuevas tecnologías, como la Inteligencia Artificial (IA), está teniendo un fuerte impacto en el mercado laboral y en los puestos de trabajo.
Y esto es solo el comienzo, ya que se acentuará en el futuro, donde los primeros afectados con esta Cuarta Revolución Industrial serán los puestos más operativos de los sectores: manufactureros; construcción y retail, que serán reemplazados por robots en las tareas más rutinarias.
Se espera que aumente en un principio la tasa de desempleo cerca de un 60% en este tipo de perfiles, los cuales, en su mayoría, deberán reubicarse o reposicionarse dentro de las compañías. Estas últimas, mantendrán un reducido número de aquellos colaboradores que cuenten con estudios especializados o que tengan las mínimas competencias para poder capacitarlos.
En paralelo, aumentará la demanda de perfiles técnicos con alto manejo en nuevas tecnologías para gestionar y/o supervisar a estos robots y para analizar los datos recibidos por estos mismos.
Sumado a esto, se abrirá un mundo de posibilidades para la imaginación y creatividad, y así agregar valor desde otro lugar en los diferentes procesos de las compañías.
Los distintos perfiles
Es así como de a poco se irá percibiendo cuatro tipos de perfiles en el mercado laboral: un perfil técnico-operativo, otro de supervisión tecnológica, un perfil más analítico que extraerá y analizará los datos desde un sistema para la toma de decisiones; y un perfil de liderazgo que destaque por sus habilidades de relacionamiento, comunicación e innovación.
El primero estará sujeto al conocimiento previo que tenga en el área técnica o a una ardua capacitación tecnológica que recaerá, en su mayor parte, en la voluntad de la empresa para invertir en su recurso humano. El segundo perfil será responsable del control a nivel remoto de las actividades automatizadas. Estos técnicos y profesionales vendrán de las carreras de técnico en electromecánica, técnico en automatización y control industrial, ingeniería de ejecución en control e instrumentación industrial, técnico en electricidad y electrónica, técnico en mecánica automotriz en maquinaria pesada, técnico en gestión y control de calidad; entre otras.
El tercer perfil deberá actualizarse en tecnología de vanguardia para mantener su puesto de trabajo y ser parte del corazón de esta nueva revolución tecnológica, basada en el análisis de los datos para la optimización de las operaciones. Estos profesionales vendrán de carreras de ingeniería en informática; ingeniería civil informática; ingeniería en estadística o carrera afín. Y por último, el cuarto perfil, deberá desafiarse en incorporar elementos blandos diferenciadores en un ambiente automatizado, y puede venir de carreras tales como ingeniería civil, ingeniería civil industrial, ingeniería en automatización y control industrial, ingeniería comercial o carrera afín.
Gracias a la tecnología, la eficiencia en la productividad mejorará entre un 15% y 20%, y las empresas podrán acceder a nuevos mercados, aumentando sus ventas y, por ende, incrementando la demanda por empleados. Es así como se espera que los perfiles más demandados vengan de las áreas de telecomunicaciones, informática, automatización y estrategia de negocios, superando con ventaja la pérdida anterior de empleos, gracias a la creación de nuevas necesidades y plazas laborales en el mediano plazo.
