Luis Díaz, Gerente de Proyectos; Rocco Abiuso, Gerente División Proyectos; ambos de In Motion.
Con el objetivo de visualizar, identificar y comprender los proyectos de software desde una perspectiva global, y no como un conjunto de piezas aisladas, la División Proyectos de In Motion incorporó en su estrategia las certificaciones que entrega el PMI (Project Management Institute).
Luis Díaz, Gerente de Proyectos de In Motion, y quien recientemente se sumó al reducido grupo de expertos chilenos que tienen la certificación PMP, indicó que ésta se orienta exclusivamente a la gestión de proyectos y es un estándar de notable reconocimiento en mercados internacionales. De hecho, agregó, “es la certificación de su tipo más importante que hoy existe a nivel mundial y que registra únicamente 202 profesionales en Chile a 2010”.
El ejecutivo de In Motion expresó también que la certificación PMP se enmarca en la búsqueda del éxito de los proyectos, estableciendo una diferencia “de lo que hacemos como empresa. Durante los últimos años la industria ha impuesto exigentes estándares de calidad a los procesos de software, especialmente en tiempos y costos, que obligan a seguir rigurosos procesos para minimizar y evitar todo tipo de errores”.
Díaz, detalló además que es cada vez más creciente el número de empresas que exigen que los procesos se ajusten a las definiciones de su negocio, manteniendo el foco y controlando las variables estratégicas en una industria que se sustenta en intangibles. “Eso, es extremadamente importante, porque el cliente tiene una visión precisa de su producto final. Por el contrario, cuando no se manejan correctamente las expectativas y los riesgos, el fracaso es muy posible”, enfatizó.
La certificación PMP, que no sólo se ajusta a proyectos informáticos, sino que a sectores de notable relevancia como la minería, banca, alimentos y grandes industrias, entrega un marco de procesos que se aplican a los proyectos en todas sus etapas, partiendo por la venta, identificando intereses, planificando la gestión de riesgo y calculando gastos. Todo, según el ejecutivo, para definir elementos tangibles que permitan medir los avances, aplicando fórmulas estadísticas de proyección que agregan objetividad a los proyectos. En total son 42 rigurosos procesos que pueden ser aplicados a cada iniciativa.
En la actualidad, agregó el profesional de In Motion, es posible liderar proyectos de software sin certificación, pero está comprobado que si no se hacen bajo estrictas normas y procedimientos y planificación, la desviación es al menos de un 60% en presupuesto, tiempo o calidad. “Desde el punto de vista de las empresas es clave que sus profesionales estén certificados PMP, ya que así aseguran gobernabilidad a los proyectos, en especial si se considera que el jefe de proyecto es el único responsable de que estos se desarrollen y ejecuten correctamente”, comentó. Díaz subrayó, además, que a pesar de existir estándares y normativas, la tasa de éxito de los proyectos en América Latina es de únicamente 46%. Por lo mismo, aclaró, la calidad y la excelencia se miden con un cliente satisfecho que no sólo busca un proveedor de tecnología, sino que un socio de negocios.
La certificación PMP permite formar parte de un selecto grupo de profesionales que lideran proyectos en distintas industrias. “Es una enriquecedora instancia para compartir experiencias y conocimientos teóricos y prácticos sustentados en acciones reales”, concluyó Díaz. El próximo paso, adelantó, es que In Motion obtenga la certificación OPM3 (Organizational Project Management Maturity Model), que entrega técnicas y métricas para la gestión de los proyectos.
